Redacción El País
La Justicia imputó este martes al principal sospechoso del homicidio del encargado de una sucursal de Ta-Ta. Si bien se investiga al individuo por el asesinato, hoy fue imputado por otros delitos: dos rapiñas a un local de Kinko, ubicado en el Prado, informó Fiscalía.
Estas rapiñas sucedieron el 24 de enero y el 3 de febrero. La fiscal del caso, Gabriela Fossati, logró la imputación del hombre por un delito de rapiña especialmente agravada por pluriparticipación y uso de arma de fuego, con prisión preventiva hasta el 13 de diciembre.
El hombre, como informó más temprano El País, había confesado su participación en el robo y el asesinato del encargado de Ta-Ta, Marcelo Demestoy, aunque luego se desdijo. Por este caso lo investiga la fiscal de Homicidios Adriana Edelman.
La magistrada "considera que no tiene los elementos para imputarlo por ese homicidio. No obstante, teniendo en cuanta que (el individuo) está en privación de libertad, va a poder profundizar esa investigación con mayor tranquilidad" y "si se logran los elementos necesarios, poder también imputarlo" por el asesinato, indicó Fiscalía.
Cabe destacar que el otro sospechoso del homicidio del encargado fue hallado muerto en Lezica, con un disparo en la cabeza y un gran porcentaje de su cuerpo incinerado. Antes de que se lo encontrara muerto, Edelman había liberado una orden de detención para el individuo, dado que "a su juicio sí tenía los elementos para imputarlo por el homicidio", informó Fiscalía.