DENUNCIA

La fiscal penal Gabriela Fossati presentó este jueves renuncia a la Asociación de Magistrados Fiscales del Uruguay argumentando que dicho gremio no investigó una denuncia que presentó por supuesta agresión de otro fiscal.

“Hoy he presentado por última vez mi renuncia al gremio de fiscales. Dos veces regresé con la esperanza de que la cordura y la unidad primara. No puedo pertenecer a un gremio que no investiga denuncias por violencia de género internas”, comunicó Fossatti a través de su cuenta de Twitter.

Y agregó: “Menos aún, ser parte del trato desigual a los miembros minoritarios y la objeción de proyectos de leyes por razones de presuntos aumentos de carga de trabajo a la institución. Interferir en el Parlamento para mí no es una potestad gremial”.

En otro tuit, Fossati advirtió que no callará. “Desde afuera, no me condiciona el silencio y seré libre de comunicar lo que siento no debería suceder”, dijo.

Un integrante de la directiva del gremio de fiscales confirmó a El País que Fossati presentó una denuncia contra un colega y agregó que la misma pasó a estudio del Comité de Ética de la institución.

Consultada por El País, Fossati dijo que el gremio nunca le dio respuesta a sus requerimientos. “El denunciado pidió el Comité de Ética para él. Nunca me llamaron a pesar de que en una ocasión la inconducta fue en el Zoom de la asamblea, donde tuve que pedirle delante de todos que no me faltara el respeto y no me hiciera caras cuando hablaba”, explicó la fiscal denunciante.

 Y agregó: “Hay otros motivos para mi renuncia que no explicaré hasta no estar fuera de la asociación. Solo puedo decir que, como suele ocurrir porque nada hemos aprendido, la directiva trató de agresivo un planteo que hice pidiendo las grabaciones de la directiva, que me fueron negadas. Fundamenté que mi intención era que mi abogada analizara con tamiz de género el trato que me asignara la persona”.

En su cuenta de Twittter, el presidente del gremio de fiscales, William Rosa, dijo que la situación que refiere el tuit de Fossati "está siendo analizada" por el Tribunal de Conducta Gremial del sindicato desde el 5 de mayo y está pendiente de resolución.