Salud bucal

álvaro heller

Un dientetratado endodónticamente puede tener previamente (en muchos casos) una pérdida de tejido dental importante. Por ello, lo que el dentista debe evaluar, antes de llevar a cabo la reconstrucción, es el grado de destrucción existente, el estado periodontal y la situación de la arcada.

Una vez establecidos dichos parámetros, podrá determinar cuál es el material idóneo para la rehabilitación oral.

A continuación, diferenciamos las fases de evaluación previas y las cualidades de cada tipo de material reconstructivo.

Antes de llevar a cabo el tratamiento restaurador definitivo, el dentista debe determinar las causas y calibrar el alcance del daño en la pieza intervenida.

Para ello, se hacen necesarias cuatro fases de evaluación:

1. el examen de la cantidad de tejido remanente mediante evaluación radiográfica (lo que esclarecerá si estamos ante un caso en el que está indicado restaurar el diente),

2. la evaluación periodontal (mediante la cual se detecta cualquier posible tipo de patología endoperiodontal que debería de ser tratada antes de la intervención),

3. la evaluación estética (un paso para el que la elección del material resulta decisiva en función del resultado perseguido) y

4. la evaluación de la morfología radicular (con la que determinar si el perno es el instrumento propicio para la restauración.

En caso de que el daño sufrido por las piezas dentales sea limitado, los composites estéticos (o resinas compuestas) es el material predilecto.

Los composites son de gran utilidad para obturar, de una manera muy versátil y con independencia de su ubicación en el interior de la cavidad oral, las pequeñas partes perdidas de la pieza dental.

En este caso, cuando la parte perdida del diente dañado es demasiado profunda, el poste intrarradicular y las cerámicas como Endo Crown, Full Veneer, Incrustaciones cerámica y muchas más serán las opciones más apropiadas.

Los molares suelen ser las piezas que presentan más erosión y desgaste dental y para las que está más habitualmente indicado este procedimiento, ya que, por su papel activo durante la masticación, es importante asegurarnos de que elegimos una opción de rehabilitación oral duradera y eficaz.

En estos casos, el poste de fibra de vidrio es una gran opción. Un material sorprendente por su gran elasticidad y resistencia, que además garantiza unos grandes resultados estéticos. Por sus cualidades, es idóneo para intervenir una pieza dental muy dañada para la reconstrucción de un diente con endodoncia.

Esta nueva estructura facilitada por el perno dental hace posible que las piezas dentales afectadas se refuercen y aumenten su resistencia, recuperando la función que tenían antes de haber sido dañadas.

Si bien hay de muchos materiales, los pernos de fibra de vidrio son la opción preferente que recomendamos, junto a los pernos colados de oro 18 platinado tipo IV.

La elección del tipo de corona en un proceso de reconstrucción de un diente endodonciado es un paso decisivo que determinará el acabado final, ya que la corona es la parte visible que imita en tamaño, forma y color el diente natural.

Según las necesidades de ajuste, resistencia y apariencia, podemos encontrar opciones satisfactorias en las coronas de cerámica pura digital o metal cerámica en circonia o disilicato de litio, p.e.. (fabricadas mediante el sistema CAD-CAM, de última tecnología, con acabados de gran calidad, facilidad para el ajuste de piezas y gran versatilidad en procesos de rehabilitación de piezas deterioradas) o en las coronas de cerámica, las más estéticas del mercado que garantizan los resultados más naturales.

Fuente: DVD Dental

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Dr. Álvaro Heller

Odontólogo, director de BioSmile y columnista de Eme

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