REALEZA

A 25 años de su muerte, Lady Di continúa generando admiración por su personalidad, carisma, elegancia y estilo. Cuando otro miembro de la realeza exhibe joyas que anteriormente fueron utilizadas por ella, rápidamente comienzan las comparaciones. En especial cuando la persona en cuestión es nada más y nada menos queCamilla Parker Bowles.

Aunque se sabe que las joyas de la Corona pueden ser utilizadas por varios miembros de la realeza, cada vez que esto sucede, los seguidores de la familia real muestran su sorpresa y no cesan hasta enumerar el listado de royals que lucieron determinadas alhajas. Sin embargo, la fascinación es mayor cuando se trata de una pieza que usó Diana Spencer. 

Ese fue el caso de un particular collar de esmeraldas, rubíes y diamantes que pertenecía a Diana y que fue “reconvertido” en broche por Camilla. La alhaja fue un regalo que le hizo la reina Isabel II a Diana el día de su boda, según reveló el sitio especializado Vanitatis. Esto significa, que no pertenecía a la Corona, sino que correspondía al joyero personal de Lady Di. Sin embargo, tras el divorcio de Carlos y Diana, ella debió devolver la joya, que volvió a ser propiedad de la Casa Real británica.

A pesar de que es común que las joyas reales sean reutilizadas, llama la atención que Camilla elija lucir un regalo de bodas hecho a Lady Di. Tal vez por eso, en vez de exhibirlo como collar, prefirió “reciclarlo” y hacer un broche.

De acuerdo con lo publicado por ¡Hola!, se trata de una pieza conocida como el broche Prince of Wales Feathers, por las tres plumas en diamantes que lleva al centro, que son símbolo del heredero al trono. 

Originalmente, la joya fue un regalo de bodas por parte de las damas de Bristol para la princesa Alexandra, quien se casó el rey Eduardo VII en 1863. La joya es un óvalo de 18 diamantes con diminutas esmeraldas intermedias, rodeando las tres plumas del Príncipe de Gales en diamante. Tiene el lema del heredero al trono: “Ich dien”, que significa “yo sirvo”, en alemán. Asimismo, la pieza tiene la opción de agregar una esmeralda en forma de gota suspendida, algo que se añadió en los últimos años. 

Al morir Alexandra, en 1925, el broche pasó en herencia a su nuera, la reina Mary, quien luego se lo dio a la Reina Madre. Finalmente, la joya pasó a manos de Diana tras su matrimonio con el príncipe Carlos, en 1981, para continuar con la tradición de que la joya, era una pieza de la princesa consorte.

Lady Di solía usarla a modo de collar y sin la esmeralda colgante, piedra que fue un regalo por parte del príncipe heredero de Arabia Saudita en la boda de Carlos y Diana. Sin embargo, cada tanto aparecía la esmeralda añadida en el collar.

Tras el divorcio de Diana y Carlos, la joya regresó a la Corona y estuvo guardada hasta 2006, tras el casamiento de Carlos y Camilla. Desde ese momento, la duquesa de Cornualles decidió usar la pieza a modo de broche. Es común ver a Camilla lucir la alhaja cuando viste de verde.