En julio de 2015 tres ingenieros eléctricos recién recibidos fundaron Focus, una empresa de servicios en ingeniería eléctrica. Una década después, la compañía se especializa en «proyectos de alto impacto» -desde el diseño electrónico y físico de dispositivos hasta el desarrollo del software que los impulsa-; más del 95% de su facturación proviene de EE.UU. y emplea a 60 personas.
El despegue llegó en 2020. «En los últimos cuatro años nos duplicamos tres veces», indicó Javier Schandy, CEO de Focus y cofundador junto a Mauricio González y Agustín Rodríguez.
El crecimiento se produjo tras ingresar al mercado de EE.UU., donde comenzaron trabajando indirectamente para una gran empresa de dispositivos médicos -cuyo nombre es confidencial-. Esa experiencia les aportó conocimientos sobre «cómo desarrollar soluciones de primer nivel», contactos y referencias que validaron su trabajo y atrajeron nuevos clientes. «Eso nos fue abriendo puertas, y al final todo eso construye una reputación; te recomiendan y eso genera más trabajo», explicó Schandy.
Además, la diferencia horaria favorable que Uruguay tiene con distintas ciudades EE.UU. le dio una ventaja a Focus en comparación con jugadores en otras ubicaciones. «Ser uruguayos es un activo» que también ha jugado a favor, agregó Schandy: el país tiene una reputación consolidada en la industria del software sobre la que la compañía se apoya, si bien su enfoque difiere del que aplican otras tecnológicas locales.
De alto impacto
Los proyectos de Focus se agrupan en tres áreas: dispositivos médicos (40%), electrónica de consumo (20%) y robótica (20%).
En la primera trabajan en dispositivos implantables o vestibles. Un ejemplo es Glucotrack, un monitor de glucosa que mide los niveles de azúcar en la sangre en forma continua y directa, lo que genera mediciones más precisas y rápidas que los parches tradicionales. Focus lidera el diseño del hardware y el firmware de este sistema, que se encuentra en ensayos clínicos en Australia y que se prevé expandir a EE.UU.
Participar en proyectos que mejoran la vida de las personas le da un propósito mayor a la compañía, añadió el CEO.
En electrónica de consumo, Focus trabaja con Also -un spin-off de la empresa de movilidad eléctrica Rivian- en el desarrollo de su primera e-bike. La firma uruguaya se sumó para «acelerar el diseño y las pruebas de producto», de cara al lanzamiento del vehículo, previsto para 2026.
También colabora con Wonder Workshop, una edtech de California, para modernizar su robot Dash, utilizado en escuelas de todo el mundo para enseñar programación a niños.
La robótica es el campo más reciente en el que ha ingresado la empresa, aunque ya ha desarrollado soluciones para Outrider AI, una empresa que diseña camiones eléctricos autónomos y el software que los controla para mover trailers dentro de centros logísticos.
«Si hay algo que tiene un montón de electrónica, es la robótica», remarcó Schandy, convencido de que este vertical es una apuesta de futuro.
Actualmente, la tecnológica exporta más del 95% de su soluciones a EE.UU.; en Uruguay trabaja con Ciemsa. Sus principales clientes son empresas de San Francisco, Los Ángeles y Silicon Valley y sus perspectivas de expansión apuntan a otras ciudades relevantes como Boston, Minnesota y Nueva York.
Desde Montevideo a Silicon Valley, Focus puede competir -y destacar- en las grandes ligas.
-
Startup uruguaya de inteligencia artificial captó US$ 7,5 millones de inversión y crecerá en Latinoamérica
La innovadora startup uruguaya que une transportistas con empresas y redefine el envío de cargas en el país
Startup uruguaya BuenVet capta US$ 500.000 de inversión y busca revolucionar la atención veterinaria
Startup uruguaya especializada en agentes de voz con IA, captó una inversión de US$ 4,5 millones en Silicon Valley
Las claves de los uruguayos que van a paso de unicornio: crear relaciones sólidas, ejecutar rápido y celebrar logros