Robert Iger ha extendido su reinado en The Walt Disney Co. hasta 2026, ya que encontrar un heredero sigue siendo difícil y aumentan las dudas sobre la viabilidad de los estudios de cine y parques temáticos de la compañía.

Disney informó el miércoles 12 que Iger, de 72 años, permanecerá como CEO durante dos años más allá de la fecha de retiro previamente anunciada. Iger terminó a regañadientes su primer ciclo en Disney en 2021, entregando el puesto principal -que ejerció entre 2005 y 2020- a Bob Chapek, un exejecutivo de parques temáticos. Chapek fue despedido en noviembre e Iger hizo un regreso triunfal como CEO.

En ese momento, Disney dijo que se le había pedido a Iger «que estableciera la dirección estratégica para un crecimiento renovado y que trabajara en estrecha colaboración con la junta directiva para desarrollar un sucesor que dirija la compañía al finalizar su mandato». Iger había declarado que se retiraría cuando terminara su contrato a fines de 2024.

«Debido a que quiero asegurarme de que Disney esté fuertemente posicionado cuando mi sucesor tome el timón, acepté la solicitud de la junta de permanecer como CEO por dos años más», indicó Iger en un comunicado el miércoles 12. «La importancia del proceso de sucesión no se puede exagerar», agregó, «y mientras la junta evalúa una lista altamente calificada de candidatos, sigo intensamente enfocado en una transición exitosa».

Lucy Nicholson/REUTERS

En los meses transcurridos desde que regresó a Disney, Iger se movió rápidamente para reducir costos (unos US$ 5.500 millones, en parte mediante la eliminación de 7.000 empleos, incluso en Pixar y ESPN) e impulsar la operación de streaming de Disney hacia la rentabilidad.

Pero aún no se ha identificado un sucesor. La junta ha estado buscando candidatos dentro y fuera de la empresa, dijo Disney.

Iger trajo a un trío de ejecutivos con él a la conferencia de prensa de Allen & Co. Sun Valley hace dos semanas, el «campamento de verano de multimillonarios» anual, y todos son vistos como posibles candidatos: Dana Walden, copresidenta de Disney Entertainment; su homólogo, Alan Bergman; y Josh D’Amaro, presidente de Parques, Experiencias y Productos de Disney.

El desafío es que, además de la sucesión, Disney está lidiando con problemas en varios frentes, incluidas nuevas preguntas sobre sus estudios de cine, dados los resultados decepcionantes en la taquilla de Elemental, Indiana Jones y el Dial del Destinoy, en menor medida, La Sirenita. Disney pretende quedarse con el control total de Hulu, pero es una operación costosa, y su deuda asciende a US$ 45.000 millones, en parte debido a la pandemia.

Mientras tanto, el motor de ganancias de la compañía durante los últimos 30 años, la televisión tradicional, incluida ESPN, se ha convertido en una sombra de lo que fue, como resultado de la caída del cable, la debilidad publicitaria y el aumento de los costos de la programación deportiva.

Iger está apostando a que los servicios de streaming harán que la empresa vuelva a crecer. Pero Disney+ ha estado perdiendo suscriptores y la división de streaming más amplia sigue sin ser rentable, perdiendo casi US$ 2.000 millones desde el comienzo del año fiscal.

Disney también afronta una prolongada huelga de guionistas; a la que acaba de sumarsela del gremio de actores, SAG-AFTRA.

A diferencia de la mayoría de sus conglomerados de medios rivales, Disney puede confiar en su negocio de parques temáticos para obtener ganancias y crecimiento, a menos que llegue una recesión. Últimamente, la asistencia a la propiedad más grande de la compañía, Disney World en Florida, pareció debilitarse como parte de una disminución más amplia del turismo en el estado.

Disney también se ha visto envuelto en unenfrentamiento público con el gobernador de Florida Ron DeSantis por el control de los servicios gubernamentales en Disney World. DeSantis ha criticado duramente a Disney como una corporación woke mientras hacía campaña para presidente.

En un email a los empleados el miércoles 12, Iger reconoció los muchos desafíos de la empresa.

«Hay más por lograr antes de que se complete este trabajo transformador, y estoy comprometido a llevarlo a cabo», prometió. «Como he dicho muchas veces desde que comenzamos esta importante transformación de la empresa, nuestro progreso no será lineal mientras continuamos navegando en un entorno económico difícil y los cambios tectónicos que ocurren en nuestra industria».