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Tensión geopolítica lleva a mercados más volátiles

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Foto: Getty Images

ESPACIO  SURA

Pese a que el escenario planteado aparece más retador para resultados corporativos a nivel global y el crecimiento económico, el 2022 seguirá siendo un año saludable.

La crisis geopolítica que se generó tras la invasión de Rusia a Ucrania impactó significativamente en mercados internacionales y aumentó la volatilidad durante febrero.

En este periodo, los mercados accionarios mostraron importantes desvalorizaciones, al igual que las tasas de gobierno internacionales, al ser considerados activos de refugio, mientras que algunos commodities como el oro y el petróleo incrementaron su valor.

Esta situación, sumado a los problemas en las cadenas de suministro y los altos precios de la energía, añade una presión adicional sobre la inflación. A nivel global las cifras de inflación continuaron mostrando niveles elevados, lo que lleva a suponer que los bancos centrales ajustarán sus políticas para hacer frente a este fenómeno, mientras que el mercado espera que la Reserva Federal (Fed) aumente hasta en siete ocasiones su tasa de referencia.

No obstante, pese a que el escenario planteado se presenta como el más retador para los resultados corporativos a nivel global, así como para el crecimiento económico, sostenemos que el 2022 continuará siendo saludable.

En este sentido, hemos decidido privilegiar a los mercados desarrollados frente a los emergentes, con una sobreponderación en Estados Unidos y Japón, por ser mercados que evidencian sorpresas económicas positivas y son defensivos en episodios de volatilidad. Además, el país norteamericano sigue mostrando solidez en sus cifras macroeconómicas y corporativas, mientras el segundo tiene la capacidad de mantener los estímulos en terreno expansivo.

En tanto, en Europa, disminuimos nuestra exposición en la Zona Euro, región que muestra una mayor dependencia hacia los países en conflicto y adoptamos una posición más reservada, tanto en la región occidental como oriental.

Por su parte, en los mercados emergentes, subponderamos Europa en línea con las tensiones que enfrenta la región y las sanciones que pudieran imponerse sobre Rusia. Asimismo, nos mantenemos neutrales en Asia y Latinoamérica, mercados que se favorecen en ciclos positivos para los commodities y materias primas.

En materia de renta fija y variable, disminuimos nuestra convicción hacia una posición neutral, con el propósito de brindar mayor estabilidad a los portafolios de inversión.

Dentro de la Renta Fija, hemos neutralizado la posición entre gobierno y crédito, dada la cualidad de los activos gubernamentales de oficiar como activos refugio frente a momentos de inestabilidad global.

Dentro de la Renta Fija corporativa, mantenemos una preferencia por la deuda proveniente de países emergentes financiados con la deuda con mejor calidad crediticia.

En la renta fija internacional, incrementamos nuestra exposición en los bonos de gobierno hasta una posición neutral, al tiempo que seguimos favoreciendo a la deuda corporativa de los mercados emergentes.

En lo que respecta al desempeño de las materias primas, observamos que han mostrado un desarrollo favorable. El precio del cobre mantuvo su tendencia. Para el caso del oro —a pesar de un alza en las tasas reales en la primera parte del año, la mayor aversión al riesgo y la condición de activo refugio— tuvo un desempeño favorable en el mes. Finalmente, el petróleo mantuvo su tendencia alcista, alcanzando nuevamente máximos desde 2014.

En el plano local, en lo que respecta a la actividad económica, los analistas estimaron que el país creció un 4,5% en el 2021, mismo nivel estimado por el Ministerio de Economía y Finanzas, ubicándose un punto porcentual por encima de las proyecciones previas.

Para este año, los analistas ajustaron levemente al alza las proyecciones del Producto Interno Bruto (PIB) hasta una mediana de 3,3%.

En cuanto a las expectativas del tipo de cambio, el dólar se ubicó a fin de año en un nivel de $45,5 por dólar, marcando un descenso importante desde la última proyección. Esto, como consecuencia de las múltiples semanas consecutivas de apreciación del peso uruguayo en lo que va del año.

Por último, en materia de inflación anual las expectativas se han ajustado al alza, alcanzando en febrero un nivel de 7,1% estimado para fin de año.

Ante la incertidumbre y volatilidad, que caracteriza el desempeño de los mercados frente a la situación de tensión entre Ucrania y Rusia, resulta fundamental contar con el asesoramiento de expertos en la materia a la hora de invertir. En SURA Inversiones ofrecemos a nuestros clientes el respaldo de un equipo de amplia formación, preparado para considerar las mejores opciones financieras para cada perfil, haciendo que los resultados de cada inversión sean óptimos.

(*) Vicepresidente de SURA Asset Management Uruguay

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