Cómo tomar las riendas de nuestras finanzas y lograr la vida que soñamos: “Todo está hecho para que gastemos”

La economista Carolina Sur, conocida en redes sociales como ‘Hola, soy Caro’, habló acerca de su nuevo libro, una guía de finanzas saludables dedicada especialmente a las mujeres.

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Carolina Sur
Economista Carolina Sur con su nuevo libro 'De gastadora a inversora. Rompiendo con lo que se espera de nosotras'.
Foto: Cortesía Carolina Sur.

Un libro para la gente que nunca leería nada de finanzas: así describe su nueva obra Carolina Sur, economista con más de 60 mil seguidores en Instagram. “No es otro manual aburrido; es una puerta a revisar nuestras creencias con respecto al dinero”, expresó. Es, además, una guía pensada especialmente para mujeres, “para aprender a ahorrar e invertir, sin importar si ganan muchísimo dinero, están tapadas de deudas o tienen tres hijos, dos trabajos y nunca les sobra un peso”.

“Muchas veces escucho que dicen: ‘Me re embolan las finanzas’. Pero esto nos tiene que importar porque si trabajamos todos los días para ganar plata, tenemos que saber usarla”, sostuvo Sur y agregó que el libro ‘De gastadora a inversora. Rompiendo con lo que se espera de nosotras’ estará disponible a partir del 8 de marzo en todas las librerías.

— El libro se llama ‘De gastadora a inversora’. ¿Eras gastadora?
— No es que fuera gastadora, sino que me di cuenta de que todo estaba armado para que gastara. No tiene tanto que ver con mi historia personal, sino con lo que la sociedad espera de nosotras: de alguna forma, todas somos gastadoras porque todo está hecho para que gastemos.

— ¿En qué sentido?
— En los shoppings, el 90% de las tiendas son para mujeres. Instagram está lleno de influencers mujeres diciéndonos que para ser exitosas necesitamos una rutina de dos horas de skincare, que no se quién tiene el tiempo y la plata para hacerlo. Además, siempre tienen ropa espectacular. Y cargamos con eso de que si no tenemos las uñas perfectas o el pelo arreglado, somos menos profesionales. Muchas veces abro el debate y la gente me dice: ‘No es tan así’. Pero mientras paso cuatro horas en la peluquería para hacerme los claritos pienso: ‘Quiero saber si llego a la reunión con la mitad del pelo amarillo y la otra mitad negro, si, como economista, me verán de la misma manera’.

Mujeres en el shopping
Mujeres compran ropa en el shopping.
Foto: Freepik.

— El libro también habla de temores. ¿Qué tiene que ver con todo esto?
— Entre mujeres hablamos de todo: política, sexo, religión… Pero, cuando se trata de plata, de cuánto gana una o cuánto costaron las vacaciones en el Este, es un tema tabú. Eso hace que tengamos miedo a preguntar, miedo a no llegar a fin de mes, miedo a que si no sabemos de plata, quedemos mal. Y sí, es obvio que no hablamos de plata porque hasta hace poco la plata ni siquiera era cosa de mujeres. Pero no hablarlo solo genera temores y falta de conocimiento.

— ¿Eso no le pasa también a los hombres?
— En realidad, este libro es universal, no es solo para mujeres. Pero cuando salió ‘Padre rico, padre pobre’ nadie preguntó por qué no dice ‘Madre rica, madre pobre’. Las mujeres estamos acostumbradas a leer literatura a la cual tenemos que adaptarnos. Necesitamos un libro escrito para mujeres. Pero pueden leerlo todos; de hecho, cuántos hombres siguen el patrón de tener que ser el proveedor…

Dicho esto, quizás a nosotras nos pase más porque históricamente estuvimos más relegadas en este tema. Si una madre en la puerta del colegio habla de que quiere hacer un viaje de negocios o de lo bien que le está yendo en el trabajo, es raro. Pero el hombre seguramente esté allí hablando de eso o haciendo networking. Necesitamos un libro para nosotras; uno que hable de cuánto nos cuesta negociar, tener una entrevista de trabajo a los 30 años y que nos miren con cara de: ‘Podés ser un problema’, o ser profesionales solteras y que todos esperen el triple de nosotras por no tener hijos.

— ¿Qué consecuencias tienen estas creencias y temores en la vida de las mujeres?
— Que ganamos menos y gastamos más. Que, como nos da miedo preguntar, terminamos pagando sin descuento. Que, cuando negociamos nuestro sueldo, pedimos menos porque nos da vergüenza.

— ¿Cuál es el primer paso para mejorar nuestro vínculo con el dinero?
— Hablar de plata. Hablar con nuestras amigas, con nuestras parejas. Cuando hablamos con un otro podemos identificar patrones y entender qué es el dinero para nosotros. Cada persona que asiste a mis charlas tiene un concepto distinto de lo que es el dinero: abundancia, frustración, miedos, éxito, fracaso… Pero es más fácil añadir un producto al carrito que pensar qué es lo que nos hace felices y si el dinero puede ayudarnos a conseguirlo o no. Son preguntas profundas, pero, si no las pensamos, nos saldrá carísimo. Como siempre digo, la vergüenza no paga vacaciones, así que dejemos de tener vergüenza.

Ahorrar dinero
Mujer ahorra dinero.
Foto: Freepik.

— ¿Cómo cambia la vida de las personas una vez que aplican eso?
— Es una revolución silenciosa, pero muy poderosa. Cuando nos damos cuenta de que la plata son opciones, que podemos decidir, que nos puede dar libertad y seguridad… Cambia todo.

Cuando nos damos cuenta de que de la misma forma que nos merecemos esa remera y esas botas, también nos merecemos aprender a ahorrar e invertir, cambia todo. Y no es de un día para el otro; de hecho, yo misma tengo que leer el libro de vez en cuando porque muchas veces me gana la emoción y la inseguridad. Con la alimentación, por ejemplo, podemos desviarnos, pero sabemos qué comidas son sanas. Lo que quiero con este libro es que la gente sepa cómo son las finanzas sanas.

Al no tener un objetivo, un destino, no nos damos cuenta de que decirle ‘no’ a algo es decirle ‘sí’ a otra cosa. Mucha gente se frustra porque no puede viajar o lograr algo que realmente quiere. Y quizás ese café que uno compra a diario, enojado con la vida, suma lo que cuesta el viaje, pero como ni siquiera sumamos lo que gastamos ni lo hablamos con otras personas, no nos damos cuenta.

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