Redacción El País
Tradicionalmente, el agua oxigenada siempre se usó con fines médicos y no cosméticos, pero ha surgido la tendencia de personas que utilizan peróxido de hidrógeno de forma casera para intentar aclarar la piel (no siempre en la cara, también en otras partes del cuerpo como por ejemplo las axilas) aunque no es un método seguro ni recomendable.
El por qué de este nuevo uso
El agua oxigenada tiene propiedades despigmentantes y blanqueadoras, por lo que algunas personas la aplican en manchas, pecas o en la piel del rostro y cuerpo para buscar un tono más claro.
Los riesgos
- Puede causar irritación, enrojecimiento o quemaduras en la piel.
- En concentraciones altas puede producir lesiones graves e incluso despigmentación permanente.
- Su uso frecuente reseca la piel y la hace más vulnerable a infecciones y manchas.
- No está formulada para un uso cosmético directo, sino como desinfectante.
Alternativas más seguras
Si el objetivo es aclarar manchas o unificar el tono de la piel, existen productos dermatológicos más efectivos y seguros, como las cremas con ácido kójico, niacinamida, vitamina C, retinoides o hidroquinona (siempre bajo control médico). También se usan tratamientos como el peeling químico o el láser.