Redacción El País
En el mundo actual, marcado por la velocidad de la información y la omnipresencia digital, hay hábitos que para las nuevas generaciones evidencian que la juventud quedó atrás. Según la experta en cultura pop Rebecca May, tanto la Generación Z como la Generación Alfa identifican ciertos gestos, frases y elecciones de consumo como señales claras de que se pertenece a otra etapa de la vida.
Dos generaciones nacidas con la tecnología en la mano
La Generación Z, integrada por quienes nacieron entre 1997 y 2012, creció en un universo de redes sociales, smartphones y conexión inmediata. Para ellos, la información se consume en formatos cortos, visuales y dinámicos, como los videos breves que dominan plataformas como TikTok o Reels.
En cambio, los nacidos desde 2013 en adelante conforman la Generación Alfa, niños que ya conviven de forma natural con asistentes virtuales, inteligencia artificial y herramientas digitales que antes parecían ficción. Para estos grupos más jóvenes, muchas de las costumbres que aún mantienen los adultos resultan anticuadas o casi imposibles de concebir.
Moda y accesorios que marcan otra edad
Hay costumbres vinculadas al vestuario y la forma de presentarse que, para estas generaciones, son sinónimo de adultez consolidada. Entre ellas, llevar leggings o calzas como prenda para salir, algo que para mayores de 30 puede ser práctico y cómodo, pero para los jóvenes luce “pasado de moda”.
También están detalles como usar medias bajas en lugar de medias altas visibles, lucir una riñonera clásica, cargar siempre una bolsa reutilizable “por si acaso”, o apostar por el tradicional conjunto de jean con blazer como recurso de “casual elegante”. Incluso combinar bolso y zapatos, un gesto de estética heredada de los años 90 y 2000, o seguir usando el mismo perfume de la universidad, son señales de que se pertenece a otra época.
Hábitos tecnológicos que hablan más que mil palabras
El mundo digital también deja pistas. Para la Gen Z, responder únicamente con emojis, especialmente la carita sonriente, es propio de alguien mayor. También lo es tener una funda tipo libro para el celular, comprar vinilos en lugar de escuchar música en Spotify o Apple Music, y imprimir la tarjeta de embarque antes de viajar “por si acaso”, gesto clásico de quien no confía del todo en la nube.
Más señales: hacer capturas de pantalla para recordar algo en vez de usar la función “guardar”, o tener al hijo como foto de perfil en redes sociales, orgullo de padre o madre pero signo inmediato de etapa adulta.
Expresiones que dejan en evidencia la generación
El lenguaje también habla. Preparar una lista de reproducción antes de un viaje, obsesionarse con Harry Potter, usar expresiones como “los jóvenes de hoy” o decir “Netflix y chill” en tono literal, son para los más jóvenes señales evidentes de que quien las usa ya no está exactamente en su misma frecuencia.
En base a El Tiempo/GDA
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