A tan solo 79 kilómetros de Montevideo, sobre la costa maragata del Río de la Plata, se encuentra Kiyú, un balneario de siete kilómetros que sorprende por su paisaje singular: barrancas que alcanzan los 50 metros de altura, playas extensas y aguas calmas.
Este rincón de San José combina naturaleza, historia y ciencia, en un entorno que todavía conserva el aire de soledad y descanso que ya se promocionaba en los avisos de prensa de mediados del siglo pasado.
Paisaje y actividades
Las imponentes barrancas son protagonistas del lugar. Desde la rambla costanera la vista se abre hacia el río y, en días de viento, es común cruzarse con pilotos practicando aladeltismo, un deporte para el que las condiciones son ideales.
A lo largo de la playa hay varias bajadas con servicio de guardavidas en temporada de verano.
El entorno se completa con juegos para niños, miradores naturales y áreas de sombra, además de opciones de alojamiento que van desde campings hasta casas particulares en alquiler.
Patrimonio arqueológico prehispánico
En 2020 se inauguró el Sendero Eco-Arqueológico Camino del Indio, un recorrido diseñado para poner en valor el rico patrimonio prehispánico de la zona. Investigaciones del Centro de Investigación Regional, Arqueológica y Territorial (CIRAT) revelaron que este espacio fue habitado hace más de 1.500 años por sociedades alfareras y horticultoras.
Morteros y piedras de molienda, cerámicas decoradas y restos de fauna local dan cuenta de una vida organizada en torno a la caza, la pesca y el cultivo. Hoy, paneles informativos en tres idiomas y códigos QR guían a los visitantes por distintos niveles de recorrido, y es posible coordinar visitas con especialistas para profundizar en la historia del lugar.
Megafauna y fósiles
Las barrancas también guardan secretos paleontológicos. En la zona se han encontrado restos de gliptodontes y toxodontes, grandes mamíferos que habitaron la región hace más de ocho mil años. Los fósiles hallados en el limo verde de la playa tienen incluso mayor antigüedad: ocho millones de años, lo que convierte a Kiyú en uno de los yacimientos más ricos del país.
El “The Last of Us” maragato
A la riqueza arqueológica y paleontológica de Kiyú se suma un hallazgo científico reciente que parece salido de la ficción. Tal como consignó la periodista María de los Ángeles Orfila en una nota publicada el último fin de semana, investigadores de la Facultad de Ciencias identificaron en las barrancas un hongo del género Cordyceps capaz de parasitar a arañas albañil y momificarlas dentro de sus refugios.
El descubrimiento, bautizado con humor por los científicos como “The Last of Us en Kiyú”, podría corresponder a una nueva especie o bien al registro más austral de este tipo de hongos, famosos por su capacidad de convertir insectos en “zombis” y por haber inspirado parte de la cultura popular contemporánea.
Cómo llegar a Kiyú
Existen dos accesos principales desde Montevideo. Uno es por el kilómetro 51 de la ruta 1, tomando el camino Mauricio a la altura de Libertad, que lleva al extremo este del balneario. El otro, más habitual, es en el kilómetro 61, en Puntas de Valdez, que conduce al extremo oeste, donde una escultura de un grillo recuerda el origen guaraní del nombre Kiyú.