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La planta industrial de Philip Morris cerrará sus puertas en Uruguay y trasladará sus operaciones a Argentina. Las medidas regulatorias y fiscales, y el expandido mercado de cigarrillos de contrabando han perjudicado la rentabilidad, dijo la empresa.

La decisión, que fue anunciada ayer por Abal Hermanos, representante de Philip Morris International (PMI), no guarda relación alguna ni tendrá incidencia en el litigio que la multinacional tabacalera entabló contra el estado uruguayo el año pasado, dijo a El País el gerente general de la filial, Nicolás Echevarría.

"La decisión de cerrar la fábrica se hizo con el solo fin de seguir siendo competitivos", explicó Echevarría.

El cierre de la fábrica afectará a 62 empleados. De todas formas, se aclaró que la empresa seguirá estando presente en el mercado uruguayo, aunque trayendo sus productos directamente desde Argentina.

Luego de su reestructuración, la compañía se quedará aproximadamente con 28 empleados que atenderán tareas administrativas, de venta y distribución.

"Las medidas regulatorias e impositivas implementadas durante los últimos años han causado un cambio en la dinámica del mercado, ya que parte del volumen de los fabricantes legales se ha trasladado a operadores ilegales. Desafortunadamente este cambio sólo castiga a los trabajadores de las compañías tabacaleras que cumplen con la ley", dijo Echevarría.

"EXTREMAS". El gerente precisó que "en PMI no estamos en contra de la regulaciones del tabaco, muy por el contrario, apoyamos medidas basadas en el principio de la reducción del daño, en todo el mundo"; aunque expresó que esas medidas, en Uruguay, han sido "extremas".

Abal Hermanos comercializa y vende marcas incluyendo Marlboro, Philip Morris, L&M, Benson &Hedges, Fiesta, Filter Plus, Silver Mint, Casino y Next, En el año 2010, tuvo una participación de mercado en Uruguay estimada de 21.7%.

La principal marca local, Fiesta, tiene una participación cercana al 10%. La facturación bruta de Abal Hnos. es de unos U$S 60 millones al año.

Como consecuencia de la política sanitaria del gobierno y las restricciones que se impusieron a la comercialización, la empresa Abal Hermanos explicó que se vio obligada a retirar del mercado siete de sus doce presentaciones, incluyendo varias de Marlboro, que representaban el 40% de las ventas de esa marca.

"Estas normas generaron un entorno de negocios excesivamente restrictivo para los operadores legítimos", expresó la firma en un comunicado, y añadió que las mismas, sin embargo "no afectan a quienes operan en el mercado negro, dada la naturaleza ilícita de sus actividades".

CONTRABANDO. De acuerdo con el Atlas del Tabaco 2009 de la Organización Mundial de la Salud, Uruguay ocupa el cuarto lugar en el mundo en lo que se refiere al contrabando de cigarrillos. "Estudios recientes demuestran que el consumo de cigarrillos de contrabando equivale a más del 25% de los cigarrillos vendidos en Uruguay", sostiene la firma.

Echevarría prefirió no responder si existieron contactos con el gobierno para evitar el cierre de la planta, pero señaló que "durante los últimos años hemos intentado, a través de un diálogo constructivo, promover la revisión de algunas medidas que contribuyeron a generar esta situación".

El gerente general de Abal Hnos. aclaró que, pese al cierre de la planta, "todas las marcas se seguirán comercializando", aunque la producción se hará en la planta industrial de Argentina.

Philip Morris inició en febrero de 2010 un reclamo contra Uruguay en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), del Banco Mundial.

La empresa afirma que las regulaciones del gobierno dañaron sus intereses y su propiedad intelectual sin compensaciones. Reclama una reparación de US$ 2.000 millones.

25% De los cigarrillos que se venden en Uruguay son de contrabando, según cifras recientes.

62 Empleados se verán afectados por el cierre de la planta industrial de Philip Morris.