Fue avistado por científicos alemanes que sobrevolaban la plataforma de hielo Rey Balduino.
Científicos alemanes descubrieron de forma casual un inmenso cráter de hielo en la Antártida oriental formado posiblemente por la caída de un meteorito gigante hasta ahora desconocida.
El cráter, de dos kilómetros de diámetro, fue detectado por Graeme Eagles, Christian Müller y Tobias Binder poco antes de Navidad, cuando sobrevolaban la plataforma de hielo Rey Balduino de la Antártida con el avión Polar 6.
Los investigadores, miembros del instituto alemán Alfred Wegener de Bremerhaven, están realizando un estudio sobre la historia geológica de la Antártida.
Los tres científicos coincidieron en atribuir la formación a un gran meteorito "debido a la tan llamativa estructura de círculos de hielo concéntricos", explicó Eagles, director de la expedición y experto del instituto AWI.
Si confirma la hipótesis, el meteorito tendría unas dimensiones fuera de la común y un diámetro de unos 100 metros. "Según un estudio de 2006, la Tierra recibe un impacto de ese tipo solo una vez cada 5.200 años", dijo Eagles.
Bindel aclaró que el hallazgo de rocas de origen cósmico en los hielos perpetuos es frecuente. El frío protege los cuerpos de la corrosión y, como suelen ser oscuros, se detectan con facilidad.
El hecho de que el nuevo cráter no hubiera sido descubierto antes podría deberse a lo remoto del sitio donde apareció, añadió Eagles. El propio equipo llegó casi por casualidad a la zona tras cambiar la ruta de vuelo debido a la falla de un instrumento de medición.
CIENCIAEl Mercurio/GDA