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Bordaberry sepultado sin honores

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A los 83 años de edad, falleció el exdictador Juan María Bordaberry, poniendo fin a una época en la política uruguaya. Fue velado en forma íntima y sepultado sin honores de Estado.

Bordaberry, que había nacido en Montevideo el 17 de junio de 1928, en el seno de una familia de estancieros, murió en la madrugada del domingo, a las 5.20 horas, a raíz de problemas respiratorios.

Sus restos fueron sepultados en horas de la tarde de ayer en el cementerio privado Parque Martinelli, en la ruta 102 kilómetro 24. La familia decidió que no se realizara un velatorio público.

El senador Pedro Bordaberry, uno de los hijos del exdictador y líder de "Vamos Uruguay", confirmó a los medios que su padre murió en el domicilio familiar, donde cumplía una condena de 30 años por asesinatos y desapariciones en la dictadura.

Según José Goicoechea, secretario de prensa del senador Bordaberry, el fallecido "estaba bastante enfermo desde hacía dos años. Hace más de un día que estaba en estado delicado", agregó.

PROTESTA. Nadie que no fuera familiar del exdictador pudo acceder a su velorio.

Sin embargo, en las puertas del cementerio se había congregado un pequeño puñado de militantes de la organización radical "Plenaria Memoria y Justicia`` que portaban carteles alusivos a las violaciones a los derechos humanos cometidas durante el régimen, pero no se produjeron incidentes.

La carroza con el féretro y el cortejo que la acompañaban ingresaron rápidamente sin ser molestados, según testigos.

Bordaberry no recibió honores de Estado por haber gobernado durante el último período de facto. Una iniciativa del Frente Amplio suspendió las honras fúnebres a quienes fueron jefes de Estado durante la dictadura.

El presidente José Mujica recibió la noticia poco después del fallecimiento, pero no hizo comentarios, indicaron voceros oficiales.

En las últimas tres décadas y hasta resultar procesado en 2006, Bordaberry se dedicó a la actividad agropecuaria en su establecimiento del departamento de Durazno.

Sus apariciones públicas luego de dejar el mando en 1976 fueron contadas. En 1993 se reunió en un hotel del centro de Montevideo con el ex- dictador chileno Augusto Pinochet, de quien era amigo declarado.

REACCIONES. De inmediato se produjeron algunas reacciones políticas. El presidente del Directorio del Partido Nacional, Luis Alberto Heber, dijo en la mañana de ayer que con el fallecimiento "termina una generación que generó un enfrentamiento entre uruguayos", y que Bordaberry fue protagonista de "un Uruguay violento que queremos dejar atrás".

A su vez, los expresidentes colorados Julio María Sanguinetti y Jorge Batlle prefirieron no realizar comentarios sobre la muerte de Bordaberry.

Por su parte, el senador frenteamplista Carlos Baráibar ofreció las condolencias a su colega, el senador Bordaberry por la muerte de su padre, y formuló algunos comentarios. "Todos en Uruguay tenemos una opinión sobre la actuación de (Juan María) Bordaberry y ante la muerte, el respeto al fallecido, más allá de que su historia va a ser juzgada pero ya ha sido juzgada por los uruguayos", declaró.

La abogada Hebe Martínez Burlé, quien junto con su colega Walter de León logró su procesamiento, dijo el domingo en declaraciones a la AP que "él (Bordaberry) fue el primer presidente de facto procesado por violar la Constitución de la República. No sé de otros antecedentes de dictadores procesados por ese delito".

"Lamento su muerte como lamento la muerte de cualquier ciudadano y me imagino como estará su familia, sumida en el dolor``, agregó la abogada.

A su vez, el senador nacionalista Francisco Gallinal dijo que Bordaberry "ha dejado heridas en la sociedad que va a pasar mucho tiempo antes que cicatricen", y que junto a Gregorio Álvarez "fueron dos de las caras más visibles de la dictadura".

Mujica: Se enteró del fallecimiento y no hizo comentarios, dijeron fuentes de su entorno.

Presidentes de facto sin honras

El Frente Amplio impulsó en el año 2003 un proyecto de ley por el cual se excluyó de los honores fúnebres conferidos por el Estado, que tienen la solemnidad que corresponde a su jerarquía, a los expresidentes y vicepresidentes de la República que hubieran ejercido sus cargos entre el 27 de junio de 1973 y 28 de febrero de 1985, es decir en la época de la dictadura.

La iniciativa aprobada por ambas Cámaras del Parlamento, apuntó a comprender a los ex- presidentes Juan María Bordaberry, Gregorio Álvarez y Rafael Addiego Bruno, que presidió el país durante algunos días en 1985.

El Decreto Ley 14.458, de fecha 11 de noviembre de 1975, establece que el Poder Ejecutivo tiene obligación de decretar honores de Estado cuando falleciere el presidente o vicepresidente de la República, o cualquiera de los ciudadanos que hayan ocupado dichos cargos.

El caso de esta ley se aplica a Bordaberry, quien fue presidente constitucional entre 1972 y 1973, pero fue mandatario de facto entre los años 1973 y 1976.

Reacciones en la política

Luis Alberto Heber

Termina una generación que dio lugar al enfrentamiento entre los uruguayos. Bordaberry fue protagonista de un Uruguay violento que queremos dejar atrás definitivamente".

Pablo Mieres

Con la muerte de Bordaberry se cierra una etapa en el país, que marcó a fuego a varias generaciones. Hay que tomar nota para que estos hechos no vuelvan a repetirse".

Eduardo Fernández

Fue uno de los principales ideólogos del golpe de Estado. Trató de armar un país sin partidos políticos y sembró la violencia de Estado junto con los militares de la época".

Francisco Gallinal

Bordaberry ha dejado heridas en la sociedad y va a pasar mucho tiempo antes de que cicatricen. Fue una de las figuras más visibles de la dictadura junto con Gregorio Álvarez".

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