Julia Rodríguez Larreta

Entusiasmada seguramente con el 58% de popularidad que le adjudica la encuesta de Poliarquía de imagen positiva, que se despega brillantemente del 19 % que tenía en el 2008 en un ascenso que comienza a partir de su viudez, la presidente argentina parece cada vez más decidida a ir por la reelección, por más que las lucubraciones al respecto no hayan desaparecido.

También es evidente que ha apostado a pleno para ganar la capital, reducto que hace mucho tiempo le es esquivo al peronismo. Como su delfín para disputar la ciudad contra Mauricio Macri y Pino Solanas, ungió a Daniel Filmus aunque su corazón se inclinara más por el Ministro de Economía. Pero cuando es cuestión de ganar hay que elegir lo que aparece con más chances, y las encuestas revelaban que el senador es más reconocido que Amado (vaya nombre) Boudou.

Pero no solo eligió al candidato a jefe de Gobierno, sino que le armó toda la grilla, incluido su vice, lo que da una idea de la independencia que tendrá el contendiente. Y no solo eso, sino que cuando el acto de lanzamiento, Filmus tuvo que cortar su discurso ante el aviso; "llega Cristina", la cual copó abiertamente la celebración y casi no lo dejó hablar.

Además, ya quedó claro cual será la tónica de la campaña; hacer notar que Filmus tendrá todo el apoyo financiero del gobierno nacional si gana. O sea, que tendrá los recursos suficientes para hacer mucho más que Macri. Con razón no exenta de amargura, éste hizo notar que sin pudor alguno, ofrecen un respaldo a la futura gestión muy diferente al recibido por él, ya que siempre le han retaceado el apoyo en todo. Desde los fondos para la policía metropolitana o las demoras en la firma que permitía el desembolso de un crucial préstamo del BID, en adelante. El mensaje oficial a la población está clarísimo. Si quieren que la ciudad disponga de todas las facilidades para llevar adelante lo que haga falta, el candidato es el oficial. También se ha notado que todas las baterías habrán de apuntar al actual jefe de Gobierno y no a Pino Solanas, líder del partido izquierdista, Proyecto Sur.

A su vez, en Santa Fe hubo comicios internos el domingo que tuvieron la particularidad de dejar a todos festejando. O casi, porque a los únicos que no les dio para eso, fueron el ex Ministro Rafael Bielsa y Rubén Giustiniani.

Que el Frente Progresista, con sus 3 candidatos haya quedado 20 000 votos por debajo de los kirchneristas, no quiere decir necesariamente que la alianza socialista-radical vaya a perder el 24 de julio. Y con el resultado que obtuvo su hombre, Antonio Bonfatti, al ser el candidato más votado, el gobernador Hermes Binner se mostró eufórico, (dentro de su estilo) y de pronto le lanzó un sputnik a Alfonsín, con quien hace meses está en conversaciones para armar una fórmula presidencial, al decir públicamente que, aspirar a la presidencia nunca puede descartarse.

Ello a pesar de que ese binomio, Alfonsín-Binner luce con buenas posibilidades de ganar en la provincia litoraleña, además de que el socialismo, fuera de las fronteras provinciales no tiene mayor fuerza. Si en cambio le diera por acordar una alianza con Solanas y Margarita Stolbizer, la Presidente mejorará sus oportunidades en este importante enclave.

Y también en el PRO hubo aplausos y buen humor por la buena perfomance ( 235000 votos) de su reciente aliado, el independiente Del Sel, uno de los integrantes del trío musical Midachi, aunque es difícil predecir que pasará con sus votantes en las elecciones a Gobernador.

En el área económica se destaca el poco avance en las negociaciones con Brasil, aunque los representantes de ambos países se hayan esforzado por dar algunas señales auspiciosas en respuesta al conflicto en el sector automotriz, segundo generador de ingresos en Argentina, a partir de la reacción brasileña por las trabas impuestas por Argentina a sus exportaciones. Políticas que primero restringen el exportar y obstaculizan luego las importaciones afectan negativamente al comercio.