DISEÑO

Solo siete quioscos parisinos han sobrevivido en la ciudad de Montevideo. Estas estructuras de hierro, pintadas de verde, tan fácilmente reconocibles como inadvertidas por los transeúntes, ya cumplieron los 110 años. El arquitecto Daniel Thul, especialista en reconstrucciones virtuales patrimoniales, investigó sobre su historia para mostrarlos tal como fueron traídos desde París por orden del intendente de ese entonces, Daniel Muñoz.

Gracias a su trabajo se puede conocer que la planta octogonal sigue siendo la misma pero los quioscos han sufrido muchas modificaciones para volverlos funcionales para los comerciantes. Por ejemplo, las capotas o los toldos no son originales; por otra parte, se han retirado las cortinas de enrollar metálicas, los prismas de vidrio de las ventanas, decoraciones del remate superior y molduras. “Lo que me interesaba era rescatar el diseño destacable que pasa desapercibido en la ciudad. Faltaba verlos sin todos los agregados que la modernidad les puso. Quise desnudar al quiosquito y mostrar su esencia”, dijo Thul a El País.

Actualmente, se puede ver un quiosco en Plaza Matriz, dos en Plaza Independencia, dos en Plaza Cagancha, uno en la esquina de 18 de Julio y Ejido y uno en Plaza de los Treinta y Tres. Se desconoce la cantidad total que fue instalada en Montevideo aunque se sabe que fueron elegidos lugares con gran afluencia de público para la venta de diarios, revistas y cigarros. “Se los puede ver en fotos. Frente a AFE había uno”, apuntó Thul.

En actas de la administración municipal de la época se lee que se pensaba instalar cuatro en Plaza Independencia y que algunos servirían como puestos de venta de flores.

En París no había quioscos de este tipo, sí instalaciones similares que recibieron el nombre de “columnas Morris”. Estas son de forma cilíndrica y tienen un remate similar; hasta hoy sirven principalmente de soporte para publicidad. Hubo un tiempo que en su interior funcionaron baños públicos pero eso quedó sin efecto por protestas de los ciudadanos por los malos olores.

“Exactamente como los de acá no he visto. Lo más parecido son las columnas Morris. Todo es del estilo del equipamiento urbano que se había armado en París durante las reformas del barón (Georges-Eugéne) Haussmann”, enseñó el arquitecto. Este funcionario del Segundo Imperio francés fue quien dirigió la reforma urbanística de París a mediados del siglo XIX.

¿Tienen protección patrimonial? No directamente. Con excepción del quiosco instalado en la Plaza de los Treinta y Tres, el resto se encuentra protegido por encontrarse en zonas con normativa específica establecida por la Intendencia de Montevideo.

Para Thul son objetos únicos, testigos de un pasado en el que la herencia cultural e histórica era significativa.