CALIDAD DE VIDA
Especialista explicó cómo actúa ante el envejecimiento, lesiones y dolores. Mirá el video
La bioestimulación con plasma rico en plaquetas (PRP) es un procedimiento autólogo, es decir, que se realiza con sangre extraída en forma indolora del paciente y tiene diversas aplicaciones: desde retroceder las señales comunes del envejecimiento de la piel (ver recuadro) hasta mejorar cicatrices, estrías, úlceras, desgarros o los síntomas de la artrosis leve.
Soledad Larraburu, hematóloga y especialista en trasplante de médula ósea, dijo en Calidad de Vida en El País que con solo una sesión “se nota la mejoría” pero, en general, se necesitan tres aplicaciones para lograr una buena reparación de las lesiones.
Dependiendo del objetivo, el PRP puede ser un tratamiento preventivo, restitutivo, curativos o paliativo.