De acuerdo con la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA), en 2027 se producirá un eclipse solar que, hasta el momento, es catalogado como el fenómeno astronómico más importante del siglo XXI. Según confirmó la agencia, este será el lunes 2 de agosto de dicho año.
Aunque gran parte de Europa, África y el sur de Asia podrá apreciar el eclipse de forma parcial, la fase en la que la Luna cubre por completo al Sol solo será visible desde una estrecha franja que atraviesa diez países. Estos son España, Marruecos, Argelia, Túnez, Libia, Egipto, Sudán, Arabia Saudita, Yemen y Somalia, según el sitio Eclipse Wise.
Este eclipse ya es denominado como “el eclipse del siglo”.
Por qué lo llaman “el eclipse del siglo”
Tal como consigna la NASA, un eclipse solar ocurre cuando la Luna pasa entre el Sol y la Tierra, y proyecta una sombra sobre la Tierra que bloquea total o parcialmente la luz del Sol.
El día marcado por la NASA para que se produzca este fenómeno, se estima que la Luna cubrirá completamente al Sol por 6 minutos y 22 segundos, lo que representa el período de totalidad más extenso en todo este siglo.
De hecho, el eclipse más largo del siglo hasta el momento, con una duración considerada inusualmente larga, se produjo el 8 de abril de 2024 y cruzó México, Estados Unidos y Canadá. Este ofreció una totalidad de 4 minutos y 28 segundos.
Qué características tiene el eclipse más largo del siglo
En la Tierra, es posible observar un eclipse solar dependiendo de cómo se alineen la Luna, la Tierra y el Sol. Esto solo ocurre ocasionalmente, porque la Luna no orbita en el mismo plano exacto que el Sol y la Tierra. El momento en que eso sucede se conoce como temporada de eclipses y tiene lugar dos veces al año.
El eclipse pronosticado para 2027, tiene la particularidad de que la trayectoria de totalidad será más ancha de lo habitual debido a que la Luna estará en su punto más cercano a la Tierra. Este también se conoce como perigeo.
El 2 de agosto de 2027, esta trayectoria tendrá aproximadamente 258 kilómetros de ancho y se extenderá a lo largo de 15.227 kilómetros sobre la superficie terrestre. En total, cubrirá unos 2,5 millones de kilómetros cuadrados, una pequeña fracción si se la compara con los 510 millones de kilómetros cuadrados que conforman la superficie de nuestro planeta.
Dadas sus características, este evento astronómico es considerado como una oportunidad única para la observación y el estudio astronómico y científico.
La Nación/GDA