Son pocos los actores que crecen con la intención de interpretar a un asesino serial. Pero el británico Freddie Highmore tenía una motivación más fuerte que los demás para lograr este objetivo.
"Cuando era más chico la gente me decía `Oh, qué inocente que sos, qué lindo`", cuenta Highmore, quien debutó a los siete años de edad. Aprovechó esa ternura a la hora de meterse con papeles destacados en películas como Descubriendo el país de Nunca Jamás (2004) y Charlie y la fábrica de chocolate (2005), pero con el tiempo se ha convertido en un chico de veintún años. "Me pregunté si no sería interesante que debajo de esa inocencia pudiera existir este otro lado que podría explotar en cualquier momento".
La ocasión de desarrollar ese potencial apareció cuando le ofrecieron la oportunidad de interpretar a un adolescente Norman Bates, el infame asesino de Psicosis (1960) en la serie del canal A&E Bates Motel. Esta serie es una precuela del clásico de Alfred Hitchcock, que hoy se estrena en Estados Unidos.
"Es como cuando eras chico y te dabas cuenta que los ladrones no andaban por ahí en ropas negras con franjas blancas, cargando grandes sacos y espiando en todas las casas", agrega. "Lucían como cualquier otro en la calle. Es lo mismo con Norman Bates. No lo etiquetarías de inmediato como un inadaptado. No es de esas personas que te hacen alejar cualquier cuchillo para estar seguro".
Highmore, que para algunos tiene cierto parecido con Anthony Perkins (el Norman Bates original) se lamenta de que muchos espectadores actuales sepan cómo termina Psicosis. "Lo mejor de esta película es que no te lo ves venir", dice. "Cuando te encontrás con Norman nunca sospechás que terminará con todos los demás. Solo parece un poco raro".
En el proceso de preparación para el papel, Highmore luchó contra la pregunta acerca de las motivaciones de Norman, muy difusas en la película de Hitchcock. "¿Inevitablemente iba a ser un asesino serial o fueron las circunstancias las que lo llevaron a eso? Es la vieja discusión entre natura y nurtura. Creo que buena parte de esto es su relación con su madre. ¿Alguno de nosotros podría ser distinto si hubiésemos sido criados por la madre de Norman Bates? ¿Podemos sentir empatía por él y sentir pena por el camino que fue obligado a tomar? Podría haber sido muy distinto".
"La relación entre Norman y Norma es ciertamente inusual e inusualmente cercana", agrega. "La ama más que nada y no puede vivir sin ella. Ambos lo encuentran tramposo y hay otras personas importantes en la vida del otro".
BUENA FAMILIA. El actor tiene una relación muy distinta con su madre, Sue Latimer, quien también es su agente. "Vengo de una familia normal y me siento afortunado de que seamos muy unidos y disfrutemos de pasar tiempo juntos", agrega el actor, cuyo padre es el actor Hugh Highmore y cuyo hermano menor también actúa. "Todavía no me he revelado. Tal vez eso esté por ocurrir".
"Tenemos nuestras diferencias", admite. "Eso es parte de sentirse cercano a alguien y poder ser completamente honesto. Tomás una resolución en base a lo que creés". Highmore agradece a sus padres el haberlo alejado de los problemas que afectan a la mayoría de los actores jóvenes.
"Se aseguraron de que pudiera mantener los pies sobre la tierra. Por otra parte, vivo lejos de Estados Unidos. Estoy aquí, con mis estudios y completamente lejos de ese ambiente". Entonces, ¿por qué algunos actores jóvenes se estrellan de forma tan espectacular? "Posiblemente por la familia", contesta reflexivo. "La mía siempre se aseguró de que yo me mantuviera lejos de los problemas o de los momentos potencialmente problemáticos. Es algo engañoso si estás por la tuya y mucha gente te dice que sos fantástico. Sos menos maduro y estás menos alerta. Comenzás a creer todo eso y pensás que sos mejor que otros solo porque has estado en la mira de todos".
Highmore, quien creció al norte de Londres, vio Psicosis por primera vez cuando tenía catorce años. En ese entonces la película ya tenía casi cincuenta años y se había consagrado como el thriller más influyente jamás hecho. A pesar de esto se sintió sorprendido, y no sólo por sus famosas vueltas de tuerca.
"Una de las cosas interesantes, que creo que Bates Motel ha superado, es que la violencia no es explícita", agrega. "En la escena de la ducha, de la que todos hablan, nunca ves el cuchillo enterrándose en la carne. Está en tu mente".
"Supongo que lo más impresionante para la mayoría de la gente es el momento de la película de Hitchcock en que ves el agua corriendo por el toilet", agrega en referencia a la escena en que Janet Leigh se deshace de algunas notas incriminatorias al tirarlas por el baño. "Eso nunca habría sido mostrado antes".
CRECIMIENTO. Aunque ha actuado casi toda su vida, Highmore no está comprometido a que el resto de sus días sean así y no tiene ninguna prisa. "Quiero seguir adelante con más capítulos de Bates Motel", asegura. "Pero no he llegado al punto en el que digo que esto es lo que quiero hacer por el resto de mi vida. Por ahora sigo dándole una oportunidad más y continuar de ese modo".
"Todo eso forma parte del proceso de crecimiento. Para el futuro veo que mi tiempo en la Universidad va a terminar en algún momento y me doy cuenta de que tengo que tomar una decisión sobre lo que voy a hacer con mis dos carreras. Lo que por ahora me retiene es que este parece ser un paso muy grande. Pero si no tenés un sueño, ¿cómo vas a hacer que ese sueño se convierta en realidad?".
Y sí, esa última frase es una cita de la película South Pacific (1949). "Es una forma muy sentimental de decirlo", reconoce. "Pero si no apuntás a algo, seguro que eso nunca va a terminar en tus manos".
Radcliffe como un modelo
Highmore cita a su viejo amigo Daniel Radcliffe, a quien su madre también representa, como un buen modelo a seguir. "Por cierto que admiro la forma en que ha manejado la fama y el éxito que le dio Harry Potter. Su familia le dio una buena base en un mundo que puede ser algo irreal por momentos. No podés perder el pie en la realidad y en lo importante de tu vida". También reconoce a Johnny Depp: "Hubo un momento en que Johnny me llamó y me dio algunos consejos para la vida. Aprendí observando cosas que quiero tener como actor y como persona".
Un psicópata por el que se puede sentir algo de simpatía
Bates Motel repasa la adolescencia de Norman Bates, cuando él y su madre Norma (Vera Farmiga) se mudan a un pueblo chico para reiniciar su vida. Norma acaba de comprar un motel con la intención de comandarlo con su hijo. Y, naturalmente, los problemas florecen. "Conseguir el balance entre el Norman algo inocente y también a veces loco es difícil. El aspecto interesante es ver hasta qué punto sabe en qué se convertirá"."Hay algo de ironía trágica en el hecho de que el público sabe más que él. Sabés que va a terminar como el conocido psycho killer pero a pesar de eso te sentís inclinado a apoyarlo a pesar de ello. Suspendés tu credulidad y pensás que tal vez sea bueno".