Jason Mraz habló con El País sobre el éxito de "I'm Yours" y el optimismo de su nuevo disco

ENTREVISTA 

Pasaron 13 años desde la salida de “I’m Yours”, aquel hit relajado que mantiene su presencia en las radios y que supo musicalizar unos cuantos momentos románticos, pero Jason Mraz tiene la misma apariencia. Es verdad que en esta videollamada con El País, el estadounidense no usa el sombrero y los lentes de sol con los que cantaba en el videoclip, pero sí tiene el mismo corte de pelo y mantiene esa característica voz, tan cálida y tranquila.

“Es un gusto conocerte”, dice con una sonrisa mientras se come un manzana frente a la cámara. Es un lunes de comienzos de agosto y el músico se encuentra en una gira virtual de prensa con medios de toda Latinoamérica para presentar Look for the Good, un disco esperanzador que ofrece 12 dosis de reggae bien bailable y festivo. Y Mraz construye su mensaje con un concepto bien claro: “Buscá lo bueno”. Por eso, esa es la primera y la última frase del álbum.

Luego de un año y medio de incertidumbre, encierro y proyectos frustrados a causa de la pandemia del coronavirus, Look For the Good es el combustible ideal para estos tiempos. Sin embargo, Mraz sorprende al revelar la historia detrás de las canciones. Fueron una presagio. “Compuse el disco en 2019 porque sabía que el 2020 iba a ser un año desafiante”, comenta antes de volver a masticar su manzana. “Se venían las elecciones en Estados Unidos y la lucha por la igualdad estaba lejos de terminar, pero no pensé que iba a ser un año tan difícil”.

“Escribí canciones para llevar un poco de esperanza al mundo y de alivianar el sufrimiento. Es una forma de invitar al oyente a que viva su vida de la mejor manera posible, siendo considerado y empático”, agrega.

Y Mraz lo deja claro en la canción que le da nombre al álbum. “Buscá lo bueno en todo, / Buscá a la gente que te ayude a liberar tu alma, / Las cosas parecen imposibles hasta que las lográs”, canta sobre el ritmo entrecortado de una guitarra reggae y coros femeninos.

“Me basé en el reggae para este disco porque es una música muy percusiva e hipnótica”, explica. “Y, una vez que te sumergís en esa hipnosis vas a concentrarte en las letras poéticas y ver cómo las melodías toman vuelo”.

Sobre su nuevo trabajo y el éxito de “I’m Yours”, Mraz habló con El País.

—Todas las canciones de Look For the Good invitan a mirar el lado positivo de la vida. Y esa es una búsqueda que atraviesa toda tu discografía. ¿Cómo surge ese interés?

—Yo pienso en la música como un arma para luchar contra la tristeza. La infelicidad es el resultado del sentimiento constante de que nos está faltando algo en la vida o que no logramos eso que tanto buscamos. Pero si lográs encontrar una canción que te ayude a cambiar tu perspectiva o que te permite darle un descanso a los pensamientos negativos, entonces vas a querer disfrutar de otro día y otra hora. La música nos ayuda a dominar los pensamientos negativos, por eso trato de trasladar ese optimismo a mis canciones.

—Ese sentimiento está presente en “I’m Yours”, que fue un hit mundial. En la versión de lujo de Look For the Good grabaste una versión relajada, más cerca al R&B. ¿Qué representa en tu vida y por qué decidiste volver a grabarla?

—La canción representa generosidad. Habla de darle tu tiempo a alguien para decirle: “¿Sabés qué? Soy tuyo”. Pero también es una forma de darle tu vida a un poder superior para decirle: “Usame como un instrumento, soy tuyo”. La versión original fue como un reggae, así que cuando la volví a grabar me pareció interesante llevarla hacia ese sonido R&B que mencionaste. Es un regalo para toda esa gente que amó la canción durante más de 10 años. La trasladé a un ritmo lento para que podamos bailar en torno al sentimiento que describe.

—Recién mencionaste que la música es un “arma para luchar contra la tristeza”, y “I’m Yours”, que recorrió el mundo, es el ejemplo ideal de tu búsqueda. ¿Sentís que con esa canción lograste traer un poco de luz a los oyentes?

—Sí, y estoy muy agradecido de que la canción haya conectado con tanta gente y culturas diferentes en todo el mundo. No sé qué fue lo que permitió que esa canción viajara tan lejos, tal vez sea la simplicidad de la letra o la complicidad de la melodía; pero lo que más me alegra de “I’m Yours” es saber que todas las personas que la escuchen van a resonar con ella gracias a ese sentimiento de generosidad. Todos tenemos a alguien que aman o algo que aman; pero incluso si no tenés amigos, cuando te sentás en la cama a tocar “I’m Yours” en la guitarra, vas sentir amor en tu instrumento. La canción te invita a hacer lo mismo frente al espejo: mirarte y decirte que sos tuyo. La canción captó ese sentimiento para invitar a sentirnos mejor.

—¿Qué te gustaría generar con Look For the Good?

—Muchas cosas. Todos tienen sus razones para escuchar música: algunos lo hacen para pasar tiempo con sus amigos, otros para compartirla y otros para cocinar. Yo hago música porque disfruto de cantar y todo mi cuerpo está comprometido con eso. Pero, para ser sincero, no tengo verdaderas expectativas sobre cómo la gente va a disfrutar de este disco;es más, es posible que haya gente que recién escuche este Look For the Good en 50 años o ni siquiera lo descubra, pero lo que importa es que se trata de un mensaje para todos los seres humanos. Es una manera de recordarles la necesidad de buscar las cosas buenas y que sean agradecidos porque esta vida es bastante rara: es tan impredecible que se puede terminar mañana. Así que, por ahora, lo único que les puedo recomendar es que canten, bailen y disfruten su vida porque todos necesitamos un poco de libertad y de alegría. Como hablamos recién, yo le doy a la gente la libertad de sentirse felices con mis canciones. Y me gustaría que así fuera.