Cinco cosas que no sabías de Jamie Dornan

Fue modelo de Calvin Klein. El boom de Jamie Dornan llegó con 50 sombras de Greyy luego protagonizó tres filmes más: The siege of Jadotville, The 9th life of Louis Drax y Anthropoid. Es el actor principal de la serie The Fall y ese rol cambió su vida.

Recibió pésimas críticas por haber protagonizado 50 sombras de Grey. Le enviaban duros mensajes a su cuenta de Instagram. No le afecta. Cuando recibe un palo, procura "recordar que formo parte del 5% de los actores que tienen trabajo y eso me hace muy feliz". Ser parte de esa franquicia le abrió las puertas y rodó tres filmes más. Su esposa, Amelia Warner, no quiso ver 50 sombras... "No voy a presionarla, es su decisión y la entiendo. No creo que le resulte muy cómodo", declaró Jamie Dorman.

La actriz principal, Dakota Johnsson, tampoco quiso que su familia viera esta película porque le resultaba inapropiado. El actor irlandés no quiso hacer un desnudo completo y puso una cláusula en el contrato: los espectadores no podrían ver su pene.

Siempre tuvo una apariencia juvenil, la gente le daba menos edad de la que realmente tenía y eso a Jamie Dornan no le gustaba. Detestaba que las amigas de su hermana le dijeran, "sos tan lindo", porque lo hacían sentir como un niño. "Cuando sos un adolescente delgado y con cara de bebé lo último que querés escuchar es que sos lindo", dice.

Se dejaba la barba para parecer más grande y desde entonces no puede verse afeitado. "Odio mi cara sin barba, lo juro". Tampoco se siente conforme con su nariz porque está levemente inclinada hacia la derecha debido a que se fracturó tres veces: sufrió un golpe jugando al rugby, su entrenador de tenis le tiró una pelota en la cara y recibió un cabezazo en una pelea nocturna.

Pero a pesar de que no se la cree, ha modelado para importantes marcas (Dior, Armani y Calvin Klein) y casi se pierde el papel de su vida por ser tan guapo: la producción de The Fall no quería que fuera el asesino Paul Spector porque su pose de sex symbol podía distraer al espectador.

Nunca fue a una escuela de interpretación, aprendió por instinto y de observar a sus colegas. Jamie Dornan debutó como actor profesional en María Antonieta (Sofía Coppola, 2006). Saltó a la fama con el millonario y sadomasoquista Christian Grey en la taquillera 50 sombras de Grey (Sam Taylor-Johnson, 2015). Reconoció que esa había sido su peor interpretación y ni dio excusas. Estaba ansioso por salir de ese rol, "no quiero ser definido por un único personaje".

Volvió a la pantalla chica para ser Paul Spector en The Fall. En la serie encarna a un psicólogo, casado, con dos hijos que tiene una doble vida: es asesino serial. Le llaman la atención los papeles oscuros y aunque no los busca le atraen las personalidades rotas. Spector es un personaje "horrible pero lo interpretaría por el resto de mi vida si pudiera". Ha sido su oportunidad y le permite "ejercitar mi músculo interpretativo en un proyecto alejado de lo que se suele esperar de mí".

Se crió en una casa frente al mar ubicada en las afueras de Belfast, la ciudad irlandesa donde se ambienta The Fall, serie que protagoniza. Pertenece a una familia de clase media-alta, sus abuelos eran curas pero la religión no pesó en su educación. Sus padres lo llevaron a la iglesia hasta que tuvo seis años, pero no demostró interés y lo dejaron ser.

Jamie Dornan recuerda haber vivido una niñez feliz hasta que su madre falleció de cáncer y perdió a cuatro de sus mejores amigos en un accidente automovilístico. Estas pérdidas tiñeron su alegría y aún hoy, con 34 años, no se repone. No aceptó la muerte de su madre y se enoja al pensar en ello. "Me frustra mucho que no esté porque ahora tengo dos hijas que no la conocieron".

Tardó en identificar su vocación pero sabía que no tenía paciencia para pasar horas frente a una computadora. Empezó teatro con 13 años sin tener claro que quería dedicarse a actuar de forma profesional, pero le tomó el gusto a expresarse distinto a como lo hacía con sus amigos del rugby.

Debutó con 15 en un escenario. Estudió marketing un año hasta que descubrió que "la simple idea de mercantilizar algo me repugnaba". Jamie Dornan no tenía un plan y su hermana lo convenció para que fuera modelo. Con 20 años ganar dinero solo por posar le resultó fantástico. Fue uno de los mejores pagos por una década, lo apodaron "el torso de oro" y realizó campañas publicitarias con Kate Moss y Eva Mendes.

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