Con información de EFE.
Rafael Nadal (37 años) aseguró que su ilusión es "volver a jugar" al tenis para sentirse "competitivo" y aclaró que aunque el 2024 "posiblemente" sea su último año como jugador profesional, aún no lo puede confirmar por completo.
"Me gustaría volver a jugar y volver a ser competitivo. La ilusión no es volver y ganar Roland Garros o Australia; que la gente no se confunda. En la época de mi vida en la que estoy todo eso queda muy lejos. No digo que sea imposible, porque las cosas en el deporte cambian muy rápido. Pero no soy un iluso; soy consciente de las dificultades a las que me enfrento", explicó.
"Una es insalvable: la edad. Y la otra son los problemas físicos que no me dejan entrenarme al 100% habitualmente. La unión de esas dos cosas hace que aspirar a algunos objetivos se antoje muy difícil o casi imposible", añadió en una entrevista con Movistar Plus.
Sobre el 2024, indicó: "Dije que posiblemente fuera mi último año y lo mantengo. Pero no lo puedo confirmar al 100%. Lo hago con un ejercicio de total naturalidad, no lo puedo contestar porque no lo sé yo. Hay muchas posibilidades de que sea mi último año porque veo cómo está mi cuerpo, pero no sé cómo estará en tres o cuatro meses. Siempre estoy abierto a lo que pueda deparar el futuro".
Nadal no piensa dónde quiere disputar su último partido oficial: "No lo sé porque no sé cuándo podré jugarlo ni dónde va a ser, no lo tengo previsto. Creo que va a ser mi ultimo año pero... ¿y si de repente estoy perfecto? ¿si me siento bien, me he recuperado por completo y me apetece seguir por qué tengo que decir ahora una cosa que no sé?".
El tenista español habló acerca del cara a cara que mantiene con Novak Djokovic por ser el tenista con más Grand Slams de la historia y consideró que para el serbio hubiera sido "una frustración más grande" no conseguirlo que para él.
"Con 22 Grand Slams se puede vivir frustrado. Creo que Novak en ese sentido lo vive de una manera más intensa de lo que lo he vivido yo. Para él, sí hubiera sido una frustración más grande no conseguirlo. Y a lo mejor por eso lo ha conseguido, ha llevado la ambición al máximo. Yo he sido ambicioso pero con una ambición sana que me ha permitido ver las cosas con perspectiva, no estar frustrado, no enojarme más de la cuenta en la cancha cuando las cosas no iban bien", dijo.
En ese sentido, indicó: "No siento nada cuando lo veo ganar un Grand Slam, no me cambia el discurso cuando voy por delante o por detrás. Me hubiera gustado ser el tenista con más Grand Slams de la historia, sin ninguna duda. De esto se trata el deporte, de intentar ser lo mejor posible. Pero no ha sido una obsesión, no me frustra".
Además del tenis, Nadal se dio el gusto de conversar sobre otros temas. Al ser consultado sobre si le gustaría ser presidente del Real Madrid, club del que se declaró fanático, luego de mostrarse dubitativo, confesó: "¿Si me gustaría? Creo que sí, pero a día de hoy no hay nada que decir porque tenemos el mejor presidente posible y lo que pueda pensar hoy no sé si es lo que pueda pensar mañana".