RUGBY
Sortearon los grupos del certamen que tendrá lugar en el país galo y Uruguay ya sabe qué escenario le tocará según en qué posición llegue al mundial. Podrían reeditarse varios partidos de Japón 2019.
World Rugby sorteó este lunes los grupos para el próximo Mundial en Francia 2023 y se conocieron los potenciales rivales de Los Teros, si es que el seleccionado uruguayo logra clasificar al certamen. Curiosamente, el seleccionado uruguayo de rugby puede llegar a reeditar varios de sus duelos de Japón 2019 en la fase de grupos.
Uruguay puede clasificar como América 1, América 2 o en el repechaje.
Clasificar por el repechaje: déjà vu de Japón 2019
Si Uruguay, como en las últimas instancias, clasifica a través de la repesca, caerá en el último lugar del grupo C. Ahí volverá a encontrarse con el seleccionado de Gales (al que sorprendió con un primer tiempo casi perfecto en Japón), a los Wallabies de Australia (siempre candidatos al título) y a Fiji. Contra esta última selección, Los Teros obtuvieron el mejor resultado de su historia cuando le ganaron en el mundial pasado en un partido que sorprendió a todo el mundo de la ovalada y ejemplificó el enorme avance de Uruguay en el rugby en los últimos años.
Ademas de reeditar esos tres duelos, Uruguay jugaría contra otro clasificado aún sin definirse de Europa si llega a Francia 2023 a través del repechaje.
Clasificar como América 1: rivales de elite
Si clasifica directamente en el primer puesto, Uruguay ocupará el lugar de América 1 en el grupo A, donde lo esperan ya dos rivales de elite como Francia y Nueva Zelanda. Además, en este escenario, Uruguay jugaría contra Italia y contra el primer clasificado africano, que no está definido.
Clasificar como América 2: duelo rioplatense
En caso de ocupar el segundo puesto de clasificación directa para un equipo americano, Uruguay caerá en el grupo D. Ahí se daría el clásico rioplatense frente a Los Pumas de Argentina. Por otro lado, Los Teros tendrían que enfrentar a Inglaterra, actual equipo subcampeón del mundo, y a Japón, que fue la sorpresa en el Mundial que hospedó en 2019. Finalmente, jugaría contra el primer clasificado de Oceanía, que sigue vacante.