JORGE SAVIA
La situación de Peñarol con referencia a eventuales refuerzos podría sinterizarse con el título de una antigua película del siglo XX: "Sin novedad en el frente".
Es que lo del recorte presupuestal y la austeridad económica en esta ocasión va en serio, no es "verso"; como apuntó ayer un dirigente: el gasto mensual referido directamente al plantel principal no pude superar los 16.000 dólares mensuales y, en ese contexto, entonces, es casi imposible que se contrate a ningún futbolista con más de US$ 10.000 de sueldo.
Ese, pues, es el techo. El que pueden sostener las vigas del Peñarol actual. Y, con relación a los parámetros salariales -y económicos- que rigen en el ámbito internacional, ese techo es bajo, evidentemente.
Por esa razón, incluso, es que ya mañana viaja hacia Italia el "Pollo" Ruben Olivera. Lo estaban poniendo a punto, realizándole el mantenimiento en la Posta del Lago, en Punta del Este, pero ahora el Grupo Casal -que es el que representa al delantero- prefiere que continúe ese trabajo en Italia, por si surge alguna posibilidad de incorporarlo a un club europeo.
Cabe agregar un detalle: el techo se llueve. Es lo que se avizora con el caso de Willinton Techera, que días atrás fue presentado en el museo del Palacio Cr. Gastón Güelfi como el primer refuerzo.
Ferrocarril de Tacuarembó, club de origen del jugador, aspira a recibir dinero para autorizar la transferencia; en vez de aceptar como recompensa por la habilitación el 10% de una eventual segunda venta, la entidad pretende dos entregas de US$ 20.000 cada una, sin depender de lo que pueda ocurrir posteriormente. Y ni Peñarol ni Javier Zeoli, representante del futbolista, están en condiciones de poner el dinero.
Así, es probable que Techera sea inscripto por un club argentino, que pediría la autorización a FIFA, como antes lo hizo el Olimpia de Honduras, y el máximo organismo se la dará, igual que lo que ocurrió con la solicitud del club hondureño. De ese modo, Ferrocarril no cobrará y Peñarol se quedará sin el refuerzo, porque también acá tiene un techo: no puede contratar a Techera y pedir la venia de FIFA, porque estaría haciendo lo que le hicieron con Bueno, el "Cebolla" y Bizera.