AURINEGROS

Desde hace varias temporadas ya que el juego de Peñarol se ha convertido en una búsqueda constante por las bandas. Pasaron distintos técnicos y diferentes esquemas, pero siempre las bandas fueron vitales.

La temporada 2021, bajo el mando de Mauricio Larriera, no fue la excepción y hombres como Facundo Torres y Agustín Canobbio o incluso Giovanni González y Joaquín Piquerez suelen ser piezas peligrosas por ese sector, pero el que deberá ganar mucho más peso en la ofensiva es el “8” que tiene que jugar de “10”: Pablo Ceppelini.

Lo mejor del hombre que llegó a Peñarol para el inicio de esta temporada desde Cruz Azul se ve cuando tiene la pelota en sus pies y no en vano fue uno de los futbolistas que más buscaron los volantes centrales e incluso los zagueros para que se encargue de generar fútbol para Agustín Álvarez Martínez y también para los punteros.

Para ser claros, aunque no tienen las mismas características, Ceppelini debería pasar a ser el hombre que reemplace el juego que perdió el conjunto mirasol con la partida de David Terans.

Detrás del “9” y en medio de los dos volantes ofensivos que una y otra vez buscarán ganarle las espaldas a los laterales del equipo rival.

De lo que puede hacer Ceppelini quedaron muestras, por ejemplo, en el choque ante River Plate en Paraguay donde puso un gran pase en cortada para Giovanni González que terminó en el gol aurinegro marcado por el “Canario”. También su buena pegada con un disparo a colocar que el arquero guaraní sacó prácticamente del ángulo para evitar su primer gol con la camiseta mirasol.

Ante Fénix, Ceppelini buscó siempre ser la conexión entre el mediocampo y el ataque pero, tal vez con el pedido de Larriera o con la acumulación de jugadores que ponía Fénix en la zona media de la cancha, se vio obligado a volcarse por las bandas lo que lo hizo perder un poco de peso teniendo en cuenta el juego que mejor le sale al habilidoso mediocampista.

Su salida en el complemento, obligó a que Facundo Torres pase a jugar por el centro, pero esa variante le hizo perder el vértigo que suele colocar el “Cuervo” por banda pese a que en esa zona quedó, el también veloz, Cristian Olivera.

Ser el encargado de crear el fútbol de Peñarol parece ser el reto de Pablo Ceppelini y las condiciones de hacerlo las tiene y ya lo demostró.