Óscar Cruz: su presagio, el récord que tiene en Peñarol y la cuarentena que lo hizo perderse un momento único

Óscar Cruz tiene 20 años, pero se puede decir que en Peñarol lleva una vida. Es goleador y no solo lo demostró en las formativas del club, también lo hizo en su segundo partido con el plantel principal tras anotar el gol de la victoria ante San Lorenzo.

Surgido en las inferiores del aurinegro, al que llegó en Séptima División, Cruz fue poco a poco creciendo en las distintas categorías, pero siempre dejando su huella goleadora, no en vano tiene un récord que no será sencillo de superar.

Con un total de 163 goles, es el máximo anotador en la historia de las formativas del club, récord que consiguió luego de superar los 144 que acumuló Miguel Ángel Peirano durante su pasaje por las juveniles de la institución.

Foto: Camila Aguilar - Formativas CAP.

Fue poco después de conseguir ese récord que Cruz, hermano de Alejo que también tuvo su pasaje por la Primera de Peñarol, presagió lo que ocurrió en la noche del martes en el Campeón del Siglo.

"Tengo la cabeza puesta en la Cuarta y quiero salir campeón con toda esta banda. A largo plazo ojalá pueda llegar la Primera y también hacer algún golcito”, había declarado en octubre de 2021 en diálogo con Fútbol a lo Peñarol (radio 1010).

En julio de 2022, poco después de renovar su contrato que firmó hasta 2025, le tocó tener la primera posibilidad de integrar el plantel principal porque Mauricio Larriera lo convocó para un juego del Campeonato Uruguayo, aunque no pudo hacer su debut.

Ese estreno que sí concretó ante Estudiantes de La Plata en la Copa Juan Manuel Olivera por la Serie Río de la Plata donde disputó los últimos 33 minutos del encuentro y que repitió pocos días más tarde ante San Lorenzo. Entró a los 80', pero esta vez se sacó las ganas de anotar y festejar con los hinchas en el Campeón del Siglo.

Todos esos goles que celebró en las juveniles, ahora se ilusiona con hacerlos en la Primera División y de la mano de Alfredo Arias tuvo esa posibilidad y no la desaprovechó.

Para Marcelo Broli era la referencia de área del plantel de Peñarol que participó en la Copa Libertadores Sub 20. Jugó cuatro partidos y anotó tres goles, pero se perdió el más importante: la final.

El covid-19, que afectó a varios futbolistas a lo largo del certamen, alcanzó al delantero que no pudo disputar la definición y como si eso fuera poco se perdió los festejos.

La cuarentena que tuvo que realizar lo obligó a quedarse en el hotel que tenía Peñarol en Ecuador a pesar de que sus compañeros ya habían llegado a Montevideo y no pudo participar del recibimiento de los hinchas que le realizaron al plantel en el Aeropuerto de Carrasco y en el Estadio Campeón del Siglo.

De todas maneras, pocos días después regresó y pudo estar con el trofeo, ese que también le permitió ser partícipe de un duelo histórico: la final de la Intercontinental Sub 20 ante Benfica.