Dicen que los partidos no se ganan antes de jugarse y es cierto. De todas maneras, también es verdad que hay equipos que pueden llegar como principales favoritos a las citas y eso es lo que le ocurre a Nacional con los tres partidos que tendrá en los próximos 10 días entre el Torneo Apertura y la Copa Libertadores.
A nadie escapa que el equipo de Álvaro Recoba está en un buen momento desde el funcionamiento colectivo y mostró muy interesantes rendimientos más allá de conseguir o no los resultados, pero ganar siempre implica un envión más para los jugadores y también para los hinchas.
Ganar da confianza y la confianza puede traer consigo buenos resultados que a esta altura, en cualquiera de los dos torneos, son muy importantes para el tricolor.
A seis puntos de Peñarol, que hoy podría sacarle nueve con un partido más, y fuera de la zona de clasificación en el certamen continental, aunque solamente por una leve diferencia de goles, Nacional precisa una racha como la que no ha conseguido hasta el momento y los tres partidos que tiene por delante podría darle.
Es que el tricolor mañana se mide con Miramar Misiones. Es cierto que tendrá el aliciente de contar con un nuevo entrenador y que ese técnico es un motivador nato como el argentino Ricardo Caruso Lombardi, pero los albos no dejan de ser favoritos ante un Cebrita que todavía no pudo ganar en el Torneo Apertura y que mañana estrenará a su tercer técnico en siete partidos.
Algo similar ocurrirá el siguiente fin de semana cuando a Nacional le toque recibir en el Gran Parque Central a Rampla Juniors. Al hecho de jugar como local, se le suma que se mide a uno de los equipos que está en la zona roja del descenso, que hoy tendrá el debut de Edgar Martínez, su nuevo entrenador, y que al igual que los del Parque Batlle estrenará su tercer técnico en seis partidos porque de hecho el Picapiedra aún debe un juego con Defensor Sporting.
Por otra parte, el próximo 24 de abril, Nacional vivirá una situación similar pero en el marco de la Copa Libertadores ya que le tocará medirse con Deportivo Táchira jugando como local. El conjunto venezolano tuvo un flojo inicio en la fase de grupos ya que perdió con River Plate como local por 2-0 y luego fue goleado por Libertad, en Paraguay, por 3-0.
Es importante remarcarlo, los partidos para ganarlos hay que jugarlos, pero Nacional tiene por delante tres encuentros que le pueden dar confianza, que podrían reforzar la línea de juego y darle un envión importante pensando en lo que viene en ambas competencias.
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