ENTREVISTA

Urupan llegó a la Liga Uruguaya de Básquetbol “sin nada que perder”. Sabía que junto con Olivol Mundial eran los equipos debutantes y que la presión recaía sobre otros. “Antes del torneo todos nos daban descendidos, no había uno que dijera: ‘Urupan se queda en la Liga’. No quizás con la holgura que hoy tenemos, pero nadie se la había jugado por nosotros. O decían: ‘Bueno el descenso va a estar entre Capitol, Urupan y Olivol Mundial. Y hoy quizá Olivol y Urupan sorprendieron a varios”, cuenta Martín Trelles, una de las figuras del equipo de Pando.

Con una estructura colectiva ensamblada y el hecho de tener su casa como un sitio donde solo ha perdido ante el líder, Urupan crece a pasos agigantados y está tercero en el torneo. “Al principio había que ganarse el respeto de todos: clubes, los demás jugadores, entrenadores, jueces y en general porque al ser un equipo nuevo en la divisional no te voy a decir que nos subestiman, pero sí que van con otra mentalidad a enfrentarnos desde un principio”, añade Trelles.

Hubo un punto de inflexión para la confianza del equipo. En las primeras fechas a uno de los debutantes le tocó jugar contra instituciones históricas como Aguada y Malvín. ¿Cómo resultó? Triunfo de local y visitante, respectivamente, para inflar el pecho. “Sorprendimos sobre todo por los triunfos consecutivos que íbamos llevando, que todos hablaban de que éramos la sorpresa y hoy en día, a mitad de la segunda rueda del torneo, podemos decir que somos una realidad del lugar que ocupamos”, cuenta el portador del dorsal número 14.

Ahora el cambio de percepción sobre el equipo se percibe dentro del campo y dentro del plantel creen que se demostraron a sí mismos que pueden ganarle a cualquiera. “Como somos una realidad, el martes Peñarol nos vino directamente a ganar, sin especular, esa es un poco la mentalidad de los equipos en la segunda rueda”. La palabra clave es identidad, y para Trelles lo esencial fue haberla obtenido de forma temprana.

El jugador entiende que hay dos pilares que lo distinguen del resto más allá de la esencia del plantel: el compromiso que tienen con el otro y el hambre de ir por más. “Yaquinta pretende que seamos solidarios, que compartamos la pelota y hace énfasis en las asistencias colectivas; tenemos un lema que es estar arriba de 20 asistencias para ganar los partidos y se ha cumplido”, dijo Trelles en referencia a la idea de su engrenador.

De acá en adelante, Trelles y todo Urupan pretende cuidar el lugar que ocupa en la clasificación: “Estar en un tercer puesto en la liga nacional con el nivel de equipos y jugadores que hay no es poco mérito para un equipo debutante”, cerró Trelles, una de las piezas claves para Yaquinta.