El hecho de que un grupito de enfermos mentales haya acudido a la puerta de un colegio judío a amenazar niños, y cantar consignas antisemitas, es algo que no tiene antecedentes, ni puede volver a ocurrir en el país. Pero no hay que equivocarse, estos grupos de delirantes siempre han existido. Simplemente que ahora se sienten validados para hacer estas cosas, porque muchos militantes de izquierda racional están propagando discursos antisemitas. Eso no puede seguir.