Publicidad

Las frases de 2018

Compartir esta noticia

Editorial

Las palmas se las lleva, como siempre y como no podía ser de otra manera, el ex presidente José Mujica. Su ya célebre definición de que “un delincuente no es otra cosa que un burgués apresurado”.

A esta misma altura del año, en 2017 propusimos el ejercicio de evocar algunas de las frases insólitas proferidas por nuestros gobernantes, a modo de balance (involuntariamente humorístico) de su comunicación con la opinión pública.

Llegados ahora al mismo desafío, nos encontramos con que el recuento excede largamente el espacio asignado a este editorial, así que no tenemos más remedio que elegir las más sorprendentes.

Las palmas se las lleva, como siempre y como no podía ser de otra manera, el ex presidente José Mujica. Su ya célebre definición de que "un delincuente no es otra cosa que un burgués apresurado" dice mucho de los valores que posee y transmite, y no exageraríamos si agregáramos que también explica el auge de la inseguridad pública.

En agosto, un periodista radial entrevistó a la recién designada Directora de Cultura de la Intendencia de Paysandú. Socarronamente, el comunicador le preguntó qué se celebraba en nuestro país el 18 de Julio y el 25 de Agosto y la jerarca respondió con otra de las frases del año: "ah, ¡me estás matando!" Causó cierto revuelo mediático, pero las aguas volvieron a su cauce cuando nada menos que la ministra de Educación y Cultura restó importancia al episodio.

En el gabinete ministerial también hubo frases de antología.

Consultado sobre su opinión acerca de la existencia de crímenes de lesa humanidad en la Venezuela de Maduro, el vicecanciller Ariel Bergamino declaró que "no estamos en condiciones en este momento de responder esa pregunta. Si lo tuviéramos claro, lo plantearíamos".

Por su parte, el ministro Bonomi justificó el aumento dramático de las rapiñas en que ahora la gente hace la denuncia simplemente porque "una señora sale a correr por la rambla y le roban la botella de agua". Humor negro

La incapacidad oficial de detener el avance del delito dio lugar a otras frases célebres. La ministra y precandidata Carolina Cosse dijo que "la seguridad no es un punto débil de estos gobiernos, sino de la realidad". Por su parte, el presidente Vázquez dio muestras de su ya reconocida proactividad: "tenemos problemas, pero despacito por las piedras".

Cuando se viralizaron fotografías de ratas en varios hogares del Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente, trascendió la solución propuesta por su Director de Salud, José Luis Priori: "consigamos un gato".

Un aspecto que evidencian muchas de las frases del año que termina, es el clima de duelo criollo que agita la interna del FA.

Al respecto, fue famoso el sincericidio del jerarca de la OPP Fernando Isabella, cuando declaró en un comité de base que "me gustaría tener un presidente que dirigiera el gobierno".

Algunas desavenencias se expusieron de manera un poco más agresiva. Como la amenaza que profirió Juan Canessa, Director de Artes y Ciencias de la IMM, a la secretaria general de Adeom, Valeria Ripoll: "¿Sos cristiana? Tal vez sepas dónde terminan los traidores". Uno prefiere creer que ese jerarca de un área dedicada a la "cultura" quiso preguntar más bien "¿leíste a Dante?"

Y no faltaron las más trasnochadas declaraciones de fe marxista-leninista. Como la del senador Juan Castillo, cuando expresó que "todo el mundo está preocupado por dar el combate contra la pobreza. Lo que hay que hacer es combatir a la riqueza".

O la pacífica y pacificadora propuesta del diputado Gerardo Núñez: "nos interesaría la democratización del uso de armas para el pueblo".

O la ilusión estalinista del diputado Oscar Groba: "el esfuerzo humano tiene que ser del Estado y servir a la sociedad. A mí me parece que los medios de comunicación deberían ser del Estado, la vivienda, los bancos, la tierra…"

O la generosa enseñanza inclusiva que brinda la jerarca departamental Fabiana Goyeneche cuando dice que los indigentes "también tienen derecho a estar en la calle".

Ese es el panorama intelectual que está exhibiendo la generación de recambio del FA.

Como el diputado Martín Couto que, en ocasión de la Ley Trans, desarrolló una extensa alocución acerca de "problematizar cómo se define el concepto de bufarrón". O como el prosecretario general de la IMM, Christian Di Candia, cuando observa que "la izquierda mejoró el estilo de vida de la gente, que en vez de viajar una vez al año, viaja tres, cambia el auto, está muy contenta". Por eso advierte enseguida que "desde el momento en que en vez de viajar tres veces viajan dos, ya dicen me están robando la plata".

Hay algo alentador en todo esto y es que como dice Jaime: "se va, se va la murga".

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Editorial

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad