@|Si no sube… es por temor al referendo contra la LUC, si sube... es por castigar a la gente de bajos recursos.
¿De dónde surgen estos comentarios que, obviamente, no están dirigidos a encomiar la gestión gubernamental? ¿Existe alguna duda sobre su origen?
Lo que es muy difícil de interpretar es cómo puede una persona ser capaz de no tener ningún escrúpulo en efectuar esas declaraciones públicas, cuando hace seis años y un mes, tuvieran que votar la asistencia de ochocientos millones de dólares de parte del Estado hacia Ancap, para evitar su quiebra.
Probablemente, la amnesia política de quienes gobernaban en ese momento y ahora son oposición, les haya hecho olvidar que el Estado somos todos los habitantes de este país que pagamos impuestos, seamos del partido político que seamos.
O sea que si ahora tenemos que pagar tres pesos más por cada litro de nafta o gasoil, antes tuvimos que pagar por esos ochocientos millones de dólares.
Y creo que no fue porque algún jeque árabe se le ocurrió subir el precio del petróleo, sino más bien por alguna seguidilla de “errores de gestión” de las autoridades de Ancap de ese entonces. Cabría preguntarle a quienes ahora realizan estas afirmaciones contra la gestión del actual gobierno, ¿cuál sería el precio de los combustibles? ¿A quién estaría perjudicando menos, cuando tenemos los precios más caros en la región?
Somos un pequeño país tomador de precios a nivel internacional, entre los que se encuentra el petróleo, que en 2021 subió de precio alrededor del 50%. Ancap tiene el monopolio sobre la importación y venta de combustibles.
Ello le otorga un poder muy fuerte dentro de la economía del país. Sus autoridades y los gobiernos de turno fueron tomando decisiones que han ido incidiendo en el precio de venta de los combustibles en el mercado. Así tenemos que alrededor del 50% del precio que pagamos por un litro de nafta son impuestos, subsidios e ineficiencias que se han acumulado progresivamente.
Un ejemplo sobre lo que los conflictos de interés existen dentro de Ancap, fue el paro de hace unos días con el apagado de la refinería por parte del sindicato y justificado por problemas endémicos en su gestión de producción de portland.
Si la gestión de la empresa no fuera pública, este sector ya habría sido liquidado.
Nuestro país necesita avanzar para resolver estos asuntos existenciales…