El Ciudadano | Montevideo
@|“Partida especial de fin de año para jubilados y pensionistas. Más de 155 mil jubilados y pensionistas de menores recursos recibirán en diciembre el pago de una partida especial de $3.151 por concepto de canasta de fin de año”.
Más de 155.000 jubilados uruguayos necesitan una partida “extra” de fin de año para llegar a diciembre y la clase política lo celebra, aplauden como si hubieran encontrado la solución, cuando en verdad solo exhiben la magnitud del fracaso. Un país donde quienes trabajaron décadas sobreviven con jubilaciones que no alcanzan ni para lo básico.
Esto es una señal inequívoca de un Estado gigante y torpe que recauda como un león, gasta como un elefante y protege como un ratón; un sistema previsional distorsionado, devorado por burocracias y privilegios, incapaz de devolver dignidad a quienes sostuvieron al país con su esfuerzo.
La Constitución debe ser el escudo del ciudadano, no del gobernante, debe garantizar que el fruto del trabajo de cada uruguayo vuelva a su bolsillo y no se pierda en estructuras ineficientes ni en parches asistenciales que solo maquillan la pobreza. La libertad individual, la propiedad del propio esfuerzo y la justicia previsional tienen que dejar de ser consignas y convertirse en obligaciones constitucionales reales.
¡Basta de migajas! Un país libre no humilla a sus viejos, los respeta, los protege y les devuelve lo que es suyo.