Publicidad

Noticias de Kurdos

La poderosa avanzada oficial iraquí sobre la ciudad de Mosul, bastión de Estado Islámico en Irak, se frena ante las dificultades de hacer frente a una insurrección que tiene profundas raíces locales. La receta de la "guerra contra el terrorismo" parece no ser suficiente para luchar contra los yihadistas. De hecho, tampoco partió la tan anunciada "ofensiva" kurda en Raqqa, otro bastión yihadista, ubicado en el norte de Siria. Las cosas tampoco van mejor en Libia, donde a pesar de los esfuerzos militares, milicianos locales ligados a Estado Islámico resisten en el énclave de Sirte. En el día en que la Oficina Europea de Policía (Europol) lanzó una alarma sobre eventuales ataques con coches-bomba en Europa planificados por la organización terrorista, ésta permanece a la defensiva y parece muy lejos de ser derrotada. El fuego de la polarización confesional y del radicalismo religioso es avivado por la campaña siria llevada adelante sin pausa por Rusia e Irán, con el apoyo del presidente sirio, Bashar al Assad. La ofensiva de Moscú y Teherán sobre Alepo continúa y es justificada por la presencia de alrededor de 6.000 simpatizantes de Al Qaeda locales en medio de unos 20.000 milicianos de otras organizaciones, mezclados entre 250.000 civiles, según datos de Naciones Unidas. TERRORISMO
El primer ministro turco responsabilizó a los simpatizantes del partido pro kurdo HDP, cuyos líderes fueron detenidos en la noche del jueves junto a nueve diputados. Al menos ocho personas murieron y más de 100 resultaron heridas tras la explosión de un coche bomba este viernes en Diyarbakir, la ciudad más grande del sudeste de Turquía, dijo el primer ministro Binali Yildirim, horas después de que la policía arrestó a los líderes del partido político más grande de la región de mayoría kurda.
Un acuerdo temporal y precario de cese el fuego fue alcanzado entre las fuerzas turcas y las milicias kurdas en el norte de Siria, donde la intervención de Ankara sumergió en más confusión el rumbo de la guerra civil. "En las últimas horas hemos recibido la garantía de que todas las partes implicadas dejarán de dispararse y se concentrarán en la amenaza del Estado Islámico", aseguró el coronel John Thomas, portavoz del Centcom, el Comando militar estadounidense en Medio Oriente. Thomas se refirió de ese modo a turcos y a kurdos, ambos aliados de Washington en la guerra contra el Estado Islámico. A raíz de esa tregua, las fuerzas del opositor Ejército Sirio Libre (ESL) apoyadas por Ankara que habían partido desde la localidad de Yarablus y llegado a unas decenas de kilómetros al norte de Manbij, bajo control kurdo, tuvieron que detenerse. El miércoles pasado, las tropas turcas y los rebeldes opositores del ESL conquistaron Yarablus, en la frontera turco-siria, que controlaba el Estado Islámico. La ofensiva del ESL debería apuntar ahora al oeste, precisamente hacia Al Bab, otro importante centro aún en manos del Estado Islámico. Las milicias kurdas Unidades de Protección del Pueblo (YPG), que Turquía considera "terroristas", no cuentan sólo con el respaldo de la aviación y de las fuerzas especiales enviadas por Washington, sino también con el de voluntarios estadounidenses. Tres de ellos, según fue reportado ayer por el Observatorio Nacional para los Derechos Humanos en Siria, fueron asesinados en los combates contra el Estado Islámico. Según fuentes citadas por la ONG, los voluntarios muertos fueron identificados como Jordan Andrew, Will Savage y Levi Jonasn, y fueron retenidos en el paso fronterizo de Simalka, entre la provincia siria de Al Hasaka e Irak.COMBATES EN SIRIAANSA
Ocurrió el mismo día en que otro menor suicida provocó la muerte de 51 personas en Turquía, durante una fiesta de casamiento kurda. Un niño iraquí kamikaze de 12 años fue detenido poco antes de hacerse explotar en Kirkuk, capital del Kurdistán iraquí, informaron medios kurdos.

Publicidad