estereotipos
ESTEREOTIPOS Alicia Mccarvell. Foto: Captura Instagram Si usás TikTok asiduamente es probable que ya te hayas topado con algún contenido de Alicia Mccarvell, la tiktoker canadiense con casi 4,8 millones de seguidores. Siempre divertida, es usual verla haciendo ejercicio con su esposo Scott y usar la plataforma para promover el body positive que propone desestigmatizar cómo se supone deben lucir los cuerpos saludables. En su video más reciente, Alicia habló sobre las muchas personas que piensan que ella y su esposo no tienen sentido como pareja debido a los estándares de belleza. El video lo realizó en respuesta a una reacción violenta por un contenido de ella y Scott en los que se los ve cambiarse (primero están envueltos en una toalla y luego lucen unos looks glamurosos para la noche), una tendencia de TikTok a la que muchas parejas se sumaron en las últimas semanas. @aliciamccarvell let's address the trash beauty standards in the room ||•• ? original sound - Alicia Mccarvell El video se viralizó y Alicia asegura que todos sabemos por qué. Algunos de los comentarios en el video incluyen cosas como "esto no cuadra" y "el amor definitivamente es ciego". En su video respuesta, la mujer explica que todos los miran e inmediatamente valoran a Scott más que a ella. Con la óptica de que es una pareja despareja, Alicia cuenta que la gente agrega cosas sobre ella para que tenga sentido diciendo cosas como “ella no debe haber estado gorda cuando se conocieron” o “tiene que ser rica”. “ Nos han hecho creer que alguien que está físicamente en forma, como Scott, nunca en un millón de años podría estar enamorado o ser compatible con una mujer gorda, y eso es únicamente porque el mundo literalmente nos ha enseñado que tenemos que valorar nuestro valor en nuestros cuerpos", sentencia. Mccarvell contó además que Scott recibe muchos DM de mujeres, la mayoría de las veces de personas delgadas que piensan que debería estar con alguien como ellas y no con Alicia. Ella confiesa que a pesar de los mensajes y de que muchas mujeres se interesan por su esposo, no siente celos. “Él valora mi humor, mi compromiso, mi amor y mi corazón cariñoso. Ninguna de estas cosas que él valora acerca de mí cambia si mi cuerpo cambia", desarrolla. “Los valores de las personas no radican en qué tan bien encajan sus cuerpos en los estándares de belleza basura de la sociedad. Y lo entiendo: si así es como piensas, es la forma en que te han enseñado. Sin embargo, es tu responsabilidad desaprenderlo", concluye en su video.
SALUD afp ¿El infarto de miocardio? Una enfermedad masculina. ¿La depresión? Cosa de mujeres. Los estereotipos ligados al género afectan a la forma en la que las mujeres, y los profesionales sanitarios, se enfrentan a los problemas de salud. Al principio tenía dolores en las piernas. Su doctor creía que era un problema de gota, o quizás síntomas de embarazo. Durante siete años aguantó el dolor porque ella misma dudaba del diagnóstico, hasta que acabó en urgencias. Y ahí de nuevo le aseguraron que su malestar se debía al bebé que acababa de tener: "enfermedad cardíaca posparto tóxica". Finalmente un reumatólogo identificó el origen de su mal: lupus. Es el testimonio de la historiadora feminista Elinor Cleghorn, que publicó en junio pasado en inglés "Mujeres enfermas: viaje a través de la medicina y el mito en un mundo creado por el hombre" ("Unwell women: a journey through medicine and myth in a man-made world").
En las redes la nación / gda Si pensamos en las princesas de Disney, lo primero que se nos viene a la cabeza es su imagen delgada, estilizada y perfecta. Ese estereotipo es el que llevó a diferentes colectivos a manifestarse en contra de esta decisión por considerarla poco inclusiva. Motivados por mostrar la belleza real de las mujeres, artistas de todas partes del mundo intentan concientizar a las personas sobre estos prototipos de belleza propuestos en los cuentos de hadas de la industria del cine infantil con diversas campañas en las redes sociales. Esta vez, Crystal Walker, una artista neoclásica, oriunda de Wisconsin, Estados Unidos, replicó en talle grande a las princesas de Disney con detalles más realísticos y por fuera de lo que se vende como un perfil triunfador y perfecto para encajar en el mundo real. Es que tanto en las películas como en las publicidades, las princesas que inspiran a sus creadores habitan en cuerpos cincelados con cinturas moldeadas y rostros finos como surgieron en su imaginación, pero alejadas del mundo real. Imagen: Instagram @neoqlassicalart “Merecés ser visto, reconocido y respetado en todos los tamaños”, escribió en Instagram la ilustradora, quien retrata en talle grande los cuerpos de las protagonistas de los cuentos infantiles, pero también los de sus amigas y seguidoras, para alejarse de los estereotipos inalcanzables de belleza que se impone a través de la industria cultural. Si bien, a lo largo de los años, esto ha venido cambiando poco a poco y surgieron nuevos personajes como el de Mérida de ‘Valiente’ y Moana; Blancanieves, Cenicienta, Rapunzel, Ariel o Aurora, las princesas más famosas del celuloide, siguen siendo delgadas y estilizadas. Por esto, Walker no solo les añade unos kilos más, sino que retrata algunos detalles que representan la realidad de una figura femenina. Imagen: Instagram @neoqlassicalart “¡Aire libre! A veces, una mitad del seno es significativamente más grande que la otra y eso está bien, cariño. Normal y natural”, escribió. En medio de su lucha, la artista también incorpora a mujeres con siluetas con curvas y a los príncipes de los cuentos de hadas más robustos y peludos de lo que se puede ver a través de las pantallas. A partir de la exposición que tuvo su trabajo en las redes sociales, la artista explicó que se dio cuenta que ahora hay más gente que ve a las princesas y los personajes de Disney en tallas grandes, más acorde a su realidad. “Me encanta ver y escuchar a todas las personas que ahora creen que los personajes se parecen más a ellos y que esto funciona positivamente”, sostuvo. Imagen: Instagram @neoqlassicalart “Alicia [en el país de las maravillas] somos todas nosotras”, aseveró en una ilustración en la que se ve a la protagonista de la novela un tanto más robusta. “Los príncipes azules vienen en todo tipo de formas, tamaños y alturas”, agregó en una de las imágenes donde se ve a las parejas del mundo de las fantasías. Sus creaciones generan cada vez más empatía en la gente que la sigue y hay quienes consideran que su arte es una forma de incluir a todos por igual. “Son preciosos. Me encanta ver la cara de Ariel más gorda de lo normal”; “Ni siquiera puedo describir con palabras cuánto amo estas cosas”; “Es la forma que debería tener una sirena, en mi opinión. ¡Muy bien hecho!”, comentan algunos usuarios en las imágenes. La artista también muestra los cambios que tienen los cuerpos con los años, por ejemplo, con un pecho más caído que el otro, papadas o rollitos en los brazos. “Esto es hermoso y muy cierto. A menudo es el seno de nuestro lado dominante [el que se cae] porque tendemos a usar más ese brazo, los músculos y la mano”, expresó una de sus seguidoras. Por otro lado, confió que cada vez que alguien insulta a sus princesas por sus curvas, siente “la necesidad de dibujarlas aún más gordas”. Imagen: Instagram @neoqlassicalart
Aplausos el tiempo / gda Los estereotipos de belleza tradicionales que se han impuesto en el último siglo presionaron a las mujeres a lucir ‘perfectas’ a pesar de que sabemos que esto es imposible. Es por esto que muchas mujeres han optado por varias maneras de eliminar el vello corporal de sus cuerpos, ya sea depilación láser, con crema, con cera, con rasuradora, entre otras. Sin embargo, ha crecido un movimiento que intenta eliminar estos estándares y normalizar los vellos femeninos en distintas partes del cuerpo, mostrándolos ‘sin asco’ en público. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Joanna Kenny ? Body Image (@joannajkenny) Muchas han encontrado en las redes sociales una manera de comenzar a eliminar estos estereotipos en la sociedad y explicar que es normal y natural que a las mujeres también les nazca vello corporal.