Redacción El País
La Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM) comparte su "lista inteligente" cada 15 días, que explica cuáles son las frutas y verduras de estación que recomienda por sus óptimas condiciones de sabor y valor nutricional, pero también por tener un mejor precio debido a su abundante oferta.
¿Qué frutas y verduras comprar del 31 de octubre al 13 de noviembre de 2023?
Para esta quincena, la UAM recomienda comprar arándanos, arvejas, cebolla de verdeo, cebolla temprana, frutilla, lechuga, limón, rúcula y zanahoria. Además, detalla cuáles son sus beneficios y recomienda buenas prácticas para su almacenaje y consumo:
Arándano: esta pequeña fruta de la familia de las Ericaceae se destaca por su alto contenido de antioxidantes, lo que la hace muy interesante entre los alimentos saludables. Pertenece al grupo de los frutos rojos junto con la frutilla, la frambuesa y la mora. Luego de la cosecha, continúa madurando. Si la partida presenta sabor ácido, se puede dejar unos días para consumirla en su punto óptimo de madurez. A la hora de elegir en el punto de venta, verificar que no presente daños, heridas o lesiones. La fruta debe estar turgente, sin arrugas que indiquen deshidratación. Rechazar las partidas que presentan frutas deformes o con colores verdosos o azul oscuro opaco.
La conservación deberá hacerse en la heladera, en un recipiente cerrado, para asegurar una duración de siete días.
Arveja: esta típica legumbre de estación primaveral debe seleccionarse en el punto de venta por presentar vainas sanas, cerradas, sin manchas, con aspecto fresco de color verde intenso. Al abrir las vainas, los granos deben estar bien formados y con tamaño uniforme y sano. Son generalmente más dulces y con menos contenido calórico que las arvejas secas.
La conservación es buena por varios días en heladera, en bolsas de nylon con pequeñas perforaciones. También admite congelarlas.
Cebolla de verdeo: en nuestro país, las variedades empleadas para su cultivo son las de cebolla colorada o blanca, que también se emplean para obtener cebolla seca o de verdeo. En ocasiones si el precio es conveniente, entre julio y diciembre se obtiene cebolla de verdeo entresacando plantas de un cultivo con destino a cebolla colorada. Cuando se siembra específicamente para este tipo de cebolla, el cultivo se puede realizar de semilla o plantando bulbos madre que dan lugar a brotes. Se comercializa en atados de entre 5 y 11 plantas según el tamaño de cada una de las plantas y el desarrollo de cada uno de los bulbos.
Se debe conservar en un recipiente cerrado dentro de la heladera, y durará siete días.
Cebolla temprana: a la hora de elegirlas, se debe optar por aquellas firmes y sanas, sin brotes, con la mayor cantidad de catáfilas de protección (cáscaras) posibles, revisar especialmente la firmeza a nivel del cuello, donde muchas veces se empiezan a expresar las podredumbres. Es importante adquirir solo lo necesario para la semana dado la menor conservación que una cebolla seca. En esta época es conveniente guardarlas en la heladera, en un recipiente cerrado ya que libera aromas que pueden contaminar otros alimentos.
Para conservarla, se debe guardar en un recipiente cerrado dentro de la heladera, para que dure cinco días.
Frutilla: son cultivadas en huertas por pequeños productores debido a la intensa mano de obra que requiere su producción especialmente en la cosecha. En nuestro país, existen dos zonas de producción de importancia, en los departamentos de Salto y San José. Estas, en combinación con la estacionalidad del cultivo, determinan que la oferta de frutilla muestre un pico en los meses de setiembre, octubre y noviembre. Los indicadores de calidad a considerar son: apariencia (color, tamaño, forma, ausencia de defectos), firmeza, sabor (sólidos solubles, acidez y compuestos aromáticos) y valor nutricional (vitamina C).
La conservación deberá hacerse en un recipiente cerrado dentro de la heladera, y durará dos días.
Lechuga: es originaria de Medio Oriente y la zona del Mediterráneo. En nuestro país se produce a lo largo de todo el año, fundamentalmente en Montevideo y Canelones. La oferta se compone de varios tipos comerciales o variedades, entre las que se destacan las mantecosas o arrepolladas, las crespas, las romanas u oreja de burro y las moradas, entre otras. Su consumo favorece la digestión, mejora el tránsito intestinal y facilita la baja de peso. Posee acción diurética y depurativa. Este producto es rico en vitaminas A, B, C, D y E, folatos, calcio, cobre, hierro, fósforo y potasio, y es una muy buena fuente de fibra. Al momento de la compra se recomienda elegir el producto de aspecto fresco, turgentes, sin daños en las hojas y de colores intensos. Las coloraciones marrones en las nervaduras y tallos principales indican el fin del período óptimo de consumo.
Debe ser conservada en un recipiente cerrado en la heladera y tiene una duración de tres días.
Limón: es originario del sudeste asiático y del sur de China. Las principales zonas de producción en Uruguay se encuentran en el litoral y en el sur del país, existiendo oferta de producto nacional a lo largo de todo el año. Su consumo previene el riesgo de padecer tumores de esófago y aporta buenas cantidades de Vitamina C, B y ácido fólico. Al momento de la compra, recordar que el color de la cáscara no es indicador del estado de madurez ni de la calidad del fruto. Conviene elegir aquellos limones pesados al tacto, de cáscara lisa, firme, brillante, sin heridas y evitar los que tengan cáscara muy gruesa.
La conservación debe ser en la heladera, en un recipiente cerrado, y durará siete días.
Rúcula: esta hortaliza de hoja es tan aromática y sabrosa como perecedera, por lo que se debe extremar los cuidados tanto en su elección como en su conservación. A la compra elegir producto que presente aspecto fresco con hojas color verde intenso, aroma característico fuerte, sin daños mecánicos. Se recomienda consumir lo más próximo posible a la compra. Una buena opción es lavar desarmando el atado o volcando el contenido de la bolsa (esta última presentación generalmente maltrata menos el producto) en una solución de agua con hipoclorito (una cucharadita por litro de agua), enjuagar con abundante agua bajo la canilla, escurrir bien y guardar en recipiente cerrado donde no se acumule el agua libre.
Se debe conservar en un recipiente cerrado en la heladera y, de esta forma, durará de tres a cuatro días.
Zanahoria: según las investigaciones históricas, sería originaria de Afganistán, desde donde se extendió a gran parte del mundo. En Uruguay se cultiva durante casi todo el año, aunque cada otoño se registra una disminución en la oferta. Este producto previene el riesgo de contraer tumores de boca, faringe, laringe y garganta. Contiene carotenoides y es una excelente fuente de vitamina A, esencial para la salud de la vista, el buen estado de la piel y tejidos y para el buen funcionamiento de nuestro sistema inmunológico. Al momento de la compra elija zanahorias sanas, firmes, crocantes y jugosas, de color anaranjado intenso y uniforme, sin coloración verde o púrpura en la zona del tallo.
Se debe conservar en un recipiente cerrado en la heladera para asegurar una duración de siete días.