La economía uruguaya desaceleró su crecimiento en 2022 frente a 2021, y el último trimestre dio señales negativas al mostrar una caída interanual y desestacionalizada.

Esto se desprende del Informe de Cuentas Nacionales del 4° trimestre de 2022, divulgado hace minutos por el Banco Central (BCU). El Producto Interno Bruto (PIB) creció 4,9% en 2022 frente a 2021 (cuando había crecido 5,3% frente a 2020 según las cifras revisadas del BCU).

En el último trimestre del año, el PIB cayó 0,1% frente a igual trimestre de 2021, pero además, se contrajo 1,3% respecto al tercer trimestre de 2022 (medición desestacionalizada).

El informe del BCU señaló que el crecimiento en todo 2022 es en parte “rebote” de la actividad, ya que en algunos meses de 2021 todavía seguían algunos sectores restringidos a causa de las medidas contra el covid-19. Además, jugaron a favor los efectos de la zafra de cultivos de verano 2021/2022 que tuvieron “rendimientos elevados”. De todas maneras, jugaron en contra “los efectos preliminares de la sequía” en la zafra de cultivos de verano 2022/2023.

Comercio, Alojamiento y Suministro de comidas y bebidas fue el sector que más creció en 2022: 10,4%. Esto se debe en buena medida a que todavía seguía muy afectado por las medidas contra el covid-19 en 2021. Este sector explicó 1,3 puntos de la expansión de 4,9%.

El otro sector que explicó buena parte del crecimiento en 2022 fue Salud, Educación, Actividades Inmobiliarias y Otros servicios, con una expansión de 5,6% en el año y una incidencia de 1,4 puntos porcentuales.

Los dos sectores que cayeron en su actividad en 2022 fueron Agropecuario, Pesca y Minería con una baja de 2,9% en su producción y Actividades de administración pública con una contracción de 1,1%.

Del lado de la demanda, hubo una recuperación del consumo de los hogares que creció 6%, también aumentaron la inversión (+9,5%, al influjo de las obras para la segunda planta de UPM) y las exportaciones de bienes y servicios (+11,1%).

El economista Aldo Lema, señaló en su cuenta de Twitter que “desde la oferta, durante el último trimestre la sequía provocó caídas interanuales de 21,5% en el agro y 5,7% en Electricidad, Gas y Agua (EGA). Por su parte, la industria cayó 4,3% por la menor producción de carne bovina y el resto de los sectores moderaron sus expansiones”.

A su vez, dijo que “durante el último trimestre la demanda interna moderó su crecimiento interanual, con expansiones de 4,5% del consumo privado y 3,9% en inversión fija. Las exportaciones se contrajeron 5,6% interanual con caída en bienes (por carne vacuna y celulosa) y fuerte aumento de servicios”.