“TALÓN DE AQUILES” FINLANDÉS
La presencia militar está prohibida en el archipiélago de Aland, en el Báltico, en virtud de un tratado firmado con Rusia en 1856.
La guerra en Ucrania hace que los finlandeses miren con preocupación al archipiélago de Aland, en el Báltico, donde la presencia militar está prohibida en virtud de un tratado firmado con Rusia en 1856 y que podría ser un punto débil en su defensa.
La petición de adhesión del país nórdico a la OTAN ha vuelto a poner sobre la mesa el debate sobre el estatuto militar de este archipiélago autónomo de 30.000 habitantes, situado a medio camino entre Suecia y Finlandia.
Según un sondeo publicado a principios de junio, un 58% de los finlandeses desea presencia militar en las islas Aland, para disuadir a Rusia de cualquier acción violenta.
En un signo más de la preocupación de las autoridades finlandesas por su seguridad, el ministerio de Interior anunció que reforzará con vallas algunas partes de la frontera de 1.300 km que comparte con Rusia.
En lo que respecta al archipiélago Aland, en su demanda de adhesión a la OTAN entregada a finales de mayo, Finlandia asegura que quiere preservar la desmilitarización y respetar el acuerdo en vigor con Rusia. Pero es una posición que los expertos consideran ingenua.
Este archipiélago “es el talón de Aquiles de la defensa finlandesa”, señala a AFP Alpo Rusi, exconsejero de la presidencia de Finlandia.
El archipiélago se desmilitarizó con la retirada de la Rusia zarista, en virtud de un tratado de 1856 tras su derrota en la guerra de Crimea.
Con la independencia de Finlandia en 1917, el archipiélago, con una población suecoparlante, se integró en la nueva nación pero con un estatuto de autonomía todavía en vigor.
Al acabar la Segunda Guerra Mundial, que provocó un conflicto sangriento entre Finlandia y la Unión Soviética, la desmilitarización de Aland continuó por un nuevo tratado de 1947, esta vez nada favorable para Helsinki.
Símbolo de la vigilancia moscovita, la URSS abrió en 1940 un consulado en Mariehamn, donde ondea hasta hoy la bandera rusa.
Desde el inicio de la guerra en Ucrania, es allí donde, cada día, los vecinos de Aland acuden a mostrar su enfado contra el presidente Vladimir Putin y su invasión a Ucrania.