Ocho muertos por incidentes; Abas suspende relaciones.
Responsables israelíes afirmaron estar abiertos a modificar las medidas de seguridad decretadas en los accesos al tercer lugar santo del islam, en la ciudad vieja, pero no a retirar los detectores de metales, origen de los incidentes.
Cinco palestinos murieron en los enfrentamientos en Jerusalén Este, parte palestina de la ciudad anexionada por Israel, y en Cisjordania, y tres israelíes murieron acuchillados el viernes en su domicilio en una colonia israelí, cerca de Ramala.
La violencia comenzó tras la instalación de los detectores de metales en las entradas de la Explanada de las Mezquitas, después de un ataque contra policías israelíes el 14 de julio. Según Israel, los atacantes habían escondido en la Explanada las armas con las que mataron a dos policías.

Los palestinos rechazaron de inmediato los arcos de seguridad porque interpretan la medida como un movimiento de Israel para modificar el statu quo en vigor desde hace décadas e incrementar su control en el lugar.
Las entradas de la Explanada están controladas por Israel, que lo llama Monte del Templo, el lugar más santo del judaísmo, pero está gestionada por Jordania. Los musulmanes pueden entrar a cualquier hora y los judíos solo en determinadas horas y sin poder rezar.
Ayer domingo la violencia por este asunto se trasladó a Jordania. Un jordano murió y un israelí resultó gravemente herido en un incidente en la embajada de Israel en Ammán. Fuerzas de seguridad jordanas fueron desplegadas alrededor de la embajada.
Desde la instalación de los pórticos de seguridad los palestinos rechazaron como protesta rezar en el complejo y han estado orando en las calles aledañas.
Con motivo de esta tensión, el presidente palestino, Mahmud Abas, anunció la congelación de contactos con Israel. En unas declaraciones hechas este domingo en Ramala (Cisjordania), sede de la Autoridad Palestina, Abas mencionó especialmente la suspensión de la cooperación de seguridad con Israel.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó también ayer, ante una reunión del gabinete de seguridad, que "los responsables de la seguridad (...) habían recomendado las medidas. Decidiremos en consecuencia", añadió.
"Los detectores se quedarán"
Israel dijo ayer domingo que no retiraría los detectores de metales en la entrada de la Explanada de las Mezquitas, pero que con el tiempo podría reducir su uso. "Se quedarán (los detectores). Los asesinos nunca nos dirán cómo buscar a los asesinos", dijo Tzachi Hanegbi, ministro israelí de Desarrollo Regional, a Radio Ejército.

VIDEOAFP