Claves para conocer al grupo terrorista que atacó a París el viernes pasado y que dejó un saldo de 129 muertos.

La meta de Estado Islámico (EI) es crear un califato que abarque todo Oriente Próximo hasta Al Andalus (denominación de la Península Ibérica bajo el poder musulmán entre los años 711 y 1492). Los califatos son organizaciones estatales regidas por la ley del islam que establecen un lider político o religioso. El EI pretende que todo el mundo musulmán jure lealtad a su líder Abu Bakr al-Baghdadi.

El Estado Islámico se ha caracterizado por generar terror mediante un campaña en redes sociales donde revelan decapitaciones, asesinatos y crucifixiones. El califato se moviliza en contra de quienes considera "infieles". Su interpretación extremista sobre la islam los hace considerar que ellos son los verdaderos portadores del mensaje de su religión y que únicamente su concepción es correcta. Por este motivo, su estrategia radica en eliminar de manera brutal a todos aquellos que prediquen un mensaje contrario o que no se ajuste a sus creencias.

Tal es la crueldad de las acciones del EI que sus predecesores. incluida Al Qaeda, han denunciado en algún momento al grupo como demasiado brutal. El grupo EI incluso excede a Al Qaeda en lo que compete a las acciones como tal, ya que sus atacantes actúan como equipos muy coordinados, con una precisión mortal que les permite ser más efectivos que sus predecesores en los atentados cometidos.

En cuanto a operaciones militares en Irak y Siria, el grupo EI opera con comandos de ataque jerarquizados y ejecuta operaciones a gran escala, como en la toma de la gran mayoría de ciudades del norte de Irak en el 2014.

Para los atentados se infiltran en los países objetivo y no actúan hasta que se les de la indicación. También se unen a su lucha grupos afines que se declaran aliados, como el caso de Boko Haram en Nigeria.

Estado Islámico utiliza las mismas células infiltradas para reclutar. Así como promueven una campaña de terror a través de redes, utilizan a estas con el fin de conseguir posibles combatientes. Convencen a jóvenes de ambos sexos a unirse a sus filas, tanto para el combate contra los ‘Cruzados’ tanto en Oriente Próximo como en Europa. Las mujeres son reclutadas también para servir como esposas de los muyahidines (guerreros) en Irak y Siria y para servir, como sus pares hombres, de kamikazes bomba en diferentes atentados.

Las dos principales captiales de recultamiento son Londres y París.  En ambas ciudades se encuentran concentrados algunos de los mayores grupos de población musulmana en Europa, llegados allí como producto de los fenómenos de colonización que tuvieron lugar hasta bien entrado el Siglo XX.