El fundador de Amazon, Jeff Bezos, y la expresentadora Lauren Sánchez se dieron ayer viernes un simbólico “sí, quiero” en la isla de San Giorgio, en Venecia (norte de Italia), en una ceremonia blindada y exclusiva con la presencia de celebridades como las Kardashian, el actor Orlando Bloom y la reina Rania de Jordania. Unos 200 invitados VIP llegaron ayer a la ciudad de los canales a bordo de yates de lujo y aviones privados. Entre ellos figuran también el magnate Bill Gates y la primogénita del presidente de Estados Unidos, Ivanka Trump.
Aunque inicialmente la boda estaba prevista en la Scuola Grande della Misericordia, un histórico palacio en el barrio de Cannaregio, finalmente se trasladó a la isla de San Giorgio Maggiore, un enclave más reservado y fácilmente controlable desde el punto de vista logístico y de seguridad, según los medios locales.
La isla, ubicada frente a la famosa plaza de San Marcos y con vistas privilegiadas al corazón de Venecia, permanece blindada con estrictos controles de acceso terrestre, fluvial y aéreo, sistemas anti-drones y vigilancia reforzada. Tras el intercambio de anillos y el “sí” simbólico -puesto que la pareja se casó de forma oficial en Estados Unidos-, se preveía ayer un show de fuegos artificiales sobre la laguna y un concierto del cantante Matteo Bocelli, hijo del tenor Andrea Bocelli.
Hoy sábado, como colofón a los tres días de celebraciones, se espera una gran fiesta y la actuación de Elton John y Lady Gaga. Otro de los motivos por los que el lugar del enlace se mantuvo en secreto durante semanas fueron las protestas y las polémicas que suscitó el matrimonio del magnate estadounidense.
Mientras algunos sectores se oponían a la celebración en cualquier punto de la ciudad, otros, como representantes de la oposición local, señalaron que un enclave sin residentes como San Giorgio evitaba conflictos con la vida cotidiana veneciana.
“La isla de San Giorgio es una alternativa viable. La seguridad está garantizada porque está aislada, mientras que en otros lugares no”, explicó a EFE Marco Gasparinetti, concejal de la lista cívica “Terra e Acqua”, quien ya había propuesto ese lugar como el más adecuado para la boda.
La jornada del jueves, inicio de las celebraciones, estuvo marcada por protestas de manifestantes vestidos de novios con máscaras venecianas y pancartas contra Bezos.
El colectivo “No Space for Bezos”, uno de los más críticos con las celebraciones, proyectó en la madrugada de ayer en el campanario de San Marcos frases como “No reyes, no Bezos, no oligarcas” con láser verde, en la torre de más de 98 metros de altura. Además, el grupo artístico Konn Artiss llevó a cabo una parodia de la boda en diferentes puntos de la ciudad, colocando maniquíes cubiertos de billetes y cajas de Amazon convertidas en inodoros.
Bezos no es el primer famoso en casarse en Venecia. Hace once años lo hicieron el actor estadounidense George Clooney y la abogada Amal Alamuddin sin causar tanto revuelo. Pero el perfil de Bezos genera más divisiones por su inmensa fortuna y por las críticas por trato que Amazon da a sus trabajadores o el impacto medioambiental de su empresa aeroespacial Blue Origin.