Con información de AFP y EFE
Una serie de cohetes lanzados contra un campo de fútbol en los Altos del Golán, un territorio sirio anexado por Israel, causó al menos 11 muertos, declaró Eli Bin, director general del Magen David Adom, equivalente israelí de la Cruz Roja.
El ejército israelí acusó al movimiento libanés Hezbolá del ataque, algo que este grupo, afín a Irán, negó tajantemente. Aún así, el ejército israelí afirmó que "preparará una respuesta" contra el movimiento libanés, asegurando que se trata del "ataque contra civiles israelíes más mortífero desde el 7 de octubre".
Netanyahu afirmó que Hezbolá "pagará un alto precio" y el presidente israelí, Isaac Herzog, declaró que el grupo "asesinó brutalmente" a niños.
“This attack shows the true face of Hezbollah—a terrorist organization that targets and murders children playing soccer on a Saturday evening.”
— Israel Defense Forces (@IDF) July 27, 2024
Watch the IDF Spox. RAdm. Daniel Hagari give remarks regarding the deadliest attack on Israel since October 7: pic.twitter.com/4VYuLMnUhb
Además de bombardear la Franja de Gaza, Israel impuso un asedio casi completo al enclave palestino el 9 de octubre, impidiendo la entrada de comida, agua, medicamentos y combustible.
La ayuda humanitaria entra ahora a cuentagotas al territorio, donde unos 2,4 millones de personas están en riesgo de hambruna, según la ONU.
Los bombardeos solo se interrumpieron durante una tregua de una semana en noviembre, pero desde entonces han fracasado las negociaciones para un nuevo alto el fuego y una liberación de rehenes.
Al Qahera News, un medio próximo a los servicios de inteligencia egipcios, informó que una nueva reunión tendrá lugar el domingo en Roma entre los representantes de los países mediadores —Egipto, Estados Unidos y Catar— y el jefe de la inteligencia israelí.
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