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Final para Arzobispo de Santiago: aceptan dimisión

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El cardenal Ricardo Ezzati deja de ser Arzobispo. Foto: AFP

IGLESIA CATÓLICA

Francisco lo decide. Es acusado de encubrir casos de abuso sexual.

El papa Francisco ha aceptado la renuncia del arzobispo de Santiago de Chile, Ricardo Ezzati, imputado en su país por el presunto encubrimiento de casos de abuso sexual, y ha nombrado en su lugar a un administrador apostólico.

La Santa Sede informó ayer sábado en un comunicado de que el pontífice ha aceptado la renuncia presentada por el cardenal, aunque sin indicar mayores detalles. En el lugar del cardenal Ezzati, Francisco ha nombrado como administrador apostólico en "sede vacante" a monseñor Celestino Años Braco,(Artaiz, Pamplona, 1945). hasta ahora obispo de Copiapó (norte). Ha desempeñado cargos como ecónomo provincial de los capuchinos de Chile, promotor de justicia (fiscal) del tribunal eclesiástico de Valparaiso y tesorero de la Asociación chilena de Derecho Canónico.

Los obispos deben presentar sus renuncias al papa una vez cumplen los 75 años de edad, pero la salida de Ezzati, de 77, se produce justo en un momento en el que en su país es investigado por encubrir presuntamente casos de abusos sexuales a menores por parte de curas.

La justicia chilena rechazó la petición de sobreseimiento definitivo presentado por la defensa del arzobispo, en medio de los escándalos por abusos sexuales que sacuden a la Iglesia en ese país. La Fiscalía indaga la participación de Ezzati en los hechos imputados al excanciller del arzobispado capitalino Óscar Muñoz, acusado por violación y abusos, y del sacerdote Jorge Laplagne, denunciado por hechos del 2002.

Asimismo, está imputado presuntamente por el encubrimiento del cura Tito Rivera, acusado de un abuso en la catedral de Santiago en 2015.

La Conferencia Episcopal de Chile publicó el pasado agosto una lista con los nombres de 42 sacerdotes y un diácono condenados por la Justicia civil o la canónica por abusos sexuales a menores.

La Fiscalía investiga 148 casos de presuntos abusos sexuales cometidos por personas vinculadas a la Iglesia católica, mientras que las víctimas ascienden a 255, según informó el pasado enero el fiscal nacional, Jorge Abbott.

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