La Nación/GDA
En medio de una ola de calor que azota a Buenos Aires desde hace una semana, este jueves -cerca del mediodía- comenzó a llover con fuerza. En poco tiempo, se reportaron problemas en la vía pública debido a las inundaciones en calles y avenidas. Si bien el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) había alertado respecto de este fenómeno, ello no evitó que vecinos experimentaran inconvenientes para circular. Se le sumó también la suspensión de cuatro líneas de subte.
Emova, el servicio concesionario de la Red de Subte de Buenos Aires, informó que las líneas A, C, H y E presentaban servicio interrumpido. La línea B circulaba con servicio limitado entre las estaciones Juan Manuel de Rosas y Dorrego. Sin embargo, desde el concesionario informaron a las 14:00 la normalización del servicio.
En ese contexto, varios barrios de la Ciudad presentaron además complicaciones provocadas por las inundaciones. Entre ellos estuvo Caballito, donde se derrumbó una obra en construcción sobre una vivienda y una mujer murió.
Palermo, Caballito, Boedo, La Boca, Belgrano y microcentro son otras de las zonas que tuvieron parte de sus calles anegadas.
En Barracas –especialmente en la Villa 21-24–, se difundieron imágenes en las que se veía que el agua había inundado calles y se había metido incluso dentro de las viviendas. Las lluvias también afectaron a Recoleta, donde, por ejemplo, se inundó y estaba sin luz el restaurante japonés Taiyaki Brothers, sobre la calle Ecuador.
“Estamos limpiando las bocas de tormenta. Antes de que lleguemos, el agua llegaba más arriba de los tobillos, estaba todo inundado”, dijo a La Nación Gustavo Zica, empleado del gobierno de la ciudad, mientras terminaba de hacer sus tareas en Libertador y Olleros, a primera hora de la tarde.
Mediante un comunicado, el gobierno porteño informó a las 14.20 que la tormenta afectó a la gran mayoría de los barrios de la ciudad. “El dato más representativo es que en la zona de Constitución cayeron más de 60 milímetros en una hora, una cantidad que no es usual”, añadió.
“Palermo, Belgrano, el Aeroparque, Retiro y Constitución fueron las zonas más afectadas con anegamientos temporarios que en la mayoría de los casos empezaron a drenar en cuanto la tormenta empezó a pasar”, comunicó.
“Subió un metro acá el agua”, lamentaba José Jaldin al inicio de la tarde, mientras secaba su auto sobre Avenida Libertador. Él es albañil y trabaja hace alrededor de un mes en la construcción de un complejo de departamentos sobre la arteria. “Veíamos de arriba como crecía el agua, faltó poco para que el auto flotara”, sostuvo.
Con una sensación térmica de 33,5°C, había poco más de 20.000 usuarios sin luz en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, de acuerdo al reporte de las empresas Edesur y Edenor en la página del Entre Nacional de Regulación de la Electricidad (ENRE).
Sin embargo, el último informe del ENRE -dado a conocer cerca de las 14:15- notificaba sobre la existencia de más de 89.000 vecinos sin suministro. Además, hubo estaciones donde las vías quedaron bajo agua o casi completamente anegadas, según reflejaron usuarios de redes sociales con videos registrados con sus teléfonos.
Según pudo saber La Nación, se reportaron además demoras en Aeroparque. Al menos 10 aeronaves aterrizaron en el establecimiento aeroportuario y aguardan para ingresar a plataforma y realizar el descenso de pasajeros. Uno de los vuelos, el AR 1882 de Aerolíneas Argentinas -procedente de Trelew, provincia de Chubut- fue desviado hacia el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. Tenía horario estipulado para aterrizar cerca de las 14:05.