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El aliado

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ANÁLISIS

La negra historia de ETA no podrá contarse sin evocar la imprescindible cooperación de Francia, que antes de descabezar sistemáticamente a las cúpulas etarras fue un santuario para la banda terrorista.

El primer gran jalón en esa colaboración, que se hizo esperar durante años ante la relativa inoperancia de los cuerpos de seguridad galos, fue el golpe contra ETA el 29 de marzo de 1992 en Bidart (País Vasco francés). Allí cayó el denominado "colectivo Artapalo", compuesto por los máximos responsables del ala militar, política y logística.

No era la primera vez que altos dirigentes etarras eran atrapados en el País Vasco francés. En 1986 fue detenido el número uno de la banda, Domingo Iturbe Abásolo, Txomin; y en 1989 Josu Ternera, precisamente el encargado hoy de leer el acta de defunción de ETA.

Bidart marcó un nuevo renglón en la colaboración entre dos policías que seguían mirándose con recelo.

La lucha contra ETA en Francia ha tenido nombres y apellidos, pero fuentes diplomáticas españolas recordaban ayer especialmente a dos: el exministro del Interior y expresidente Nicolas Sarkozy y la jueza antiterrorista Laurence Le Vert.

La llegada de Nicolas Sarkozy en 2002 al Ministerio del Interior, supuso un golpe de timón en la estrategia antiterrorista francesa. Dos años después del desembarco de Sarkozy al frente de Interior, tuvo lugar una operación que para muchos analistas supuso el principio del fin para ETA: fue desarticulada la cúpula etarra formada por Mikel Albisu Iriarte, "Mikel Antza", y su pareja, Soledad Iparraguirre, "Amboto", la otra encargada hoy de anunciar el fin del grupo.

En el flanco judicial ya había emergido la figura de la jueza Laurence Le Vert, la implacable magistrada que, siempre ajena a los focos mediáticos, se encargó durante 25 años de investigar los crímenes de los etarras y de facilitar su entrega a España cuando correspondía.

Y pese a que los etarras se cuidaron siempre de no causar víctimas entre los ciudadanos franceses, un gendarme galo, Jean Serge Nérin, se convirtió, tras ser tiroteado en 2010, en el último nombre de la macabra lista de asesinatos de la banda criminal. *PERIODISTA DE LA AGENCIA EFE

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