En la primera semana de vacunación contra la gripe se suministraron 64.831 dosis frente a las 99.748 que fueron dadas en igual período del año anterior. La caída, apenas superior al 35%, preocupa a las autoridades del Ministerio de Salud, dijo la subsecretaria Cristina Lustemberg.
La jerarca instó a que la población de riesgo se vacune lo "antes posible" porque la droga demora hasta dos semanas en comenzar su efecto.
Los bajos porcentajes de participación abarcan a todos los grupos objetivo y en ninguno de los casos supera al 10% de la población. Ni siquiera entre los profesionales de la salud —que el año pasado se logró comprender al 69%— se ha podido romper esa barrera. Hasta el lunes solo se había vacunado el 8% de los trabajadores.
Lustemberg pidió que los profesionales den el ejemplo y además explicó que es importante que acudan a vacunarse para evitar el ausentismo laboral en una época del año en que las consultas aumentan entre 30% y 40%.
Entre las embarazadas el porcentaje de vacunadas esta primera semana no llega al 3%, siendo estas mujeres las más vulnerables ante las complicaciones que pueda despertar una gripe.
Una cifra similar fue la concurrencia de niños de entre seis meses y cuatro años, y casi el doble para los mayores de 65. Y eso que las vacunas son gratuitas, y hay 462 centros de vacunación.

PREOCUPA AL MSP