Redacción El País
El sindicato de la Guardia Republicana planteó en un comunicado que el ministro del Interior, Carlos Negro, debe renunciar luego del atentado contra la fiscal de Corte, Mónica Ferrero, quien otrora fuera fiscal de Estupefacientes.
La Unión de Policías de la Guardia Republicana cuestionó, entre otras cosas, la forma en que está dispuesta la custodia en la casa de Ferrero, compuesta por policías de la Republicana.
Los atacantes llegaron al patio trasero de la vivienda de la fiscal a través del techo, eludiendo así a la custodia. Luego lanzaron un artefacto explosivo que por estas horas se estudia si era una granada, y dispararon al menos dos veces contra las paredes.
De acuerdo a lo que indican las principales hipótesis policiales, se trató de un ataque de alguna organización criminal vinculada al narcotráfico que buscó enviar un mensaje a través de quien fuera una de las investigadoras en esta materia antes de ascender a la Fiscalía de Corte como subrogante.
No se descarta que los involucrados pertenezcan al clan "Los Albín", grupo al que se le atribuyen los 2.200 kilos de cocaína incautados en agosto en una chacra de Punta Espinillo y que tendría conexión con Sebastián Marset.
Qué dice el comunicado de la Unión de Policías de la Guardia Republicana
Los policías sindicalizados plantearon que "el atentado contra una fiscal especializada en narcotráfico no es un hecho aislado, es un golpe directo a las instituciones de la República y a la seguridad de todo el país".
"Cuando se ataca a quienes investigan el crimen organizado, se busca doblegar al Estado y sembrar miedo en la sociedad. Pero en esta situación no solo está en riesgo la vida de la fiscal. También lo están los policías destinados a su custodia, quienes hoy cumplen servicio de forma estática, en una garita y sin garantías reales, lo que demuestra que hubo una falla grave en la planificación, ya que no se realizó un relevamiento adecuado del servicio en función de la importancia del mismo, lo que dejó expuestos tanto a la fiscal como al personal policial", añade el escrito.
"Custodiar en estas condiciones es un doble atropello: a la seguridad institucional y a la vida de nuestros funcionarios. No se puede hablar de respaldo a la Policía mientras se nos envía a la primera línea sin herramientas, sin planificación y sin respeto por la dignidad humana", indicó el sindicato.
Desde el gremio se pidió entonces la "renuncia inmediata del ministro del Interior" ya que "bajo su mandato han ocurrido atentados contra policías en la vía pública, en espectáculos, y ahora contra una fiscal".
"Su continuidad es un riesgo para todos: no tiene llegada a sus funcionarios ni contundencia hacia la delincuencia", sentencia el comunicado.
La seguridad de Ferrero ya fue reforzada, confirmaron jerarcas. Hasta la mañana de este domingo el dispositivo de seguridad visible consistía en dos agentes de la Guardia Republicana con ametralladoras ubicados cerca de una garita en una esquina tranquila de un barrio montevideano.
De momento hay dos detenidos por este episodio y se incautó el vehículo en el que viajaban.
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