CONFLICTO
El sindicato asegura que la no renovación del convenio colectivo es "una especie de declaración de guerra", y que el gobierno les "tira a partir", dijo a El País su presidente, Gerardo Rodríguez.
Federación Ancap (Fancap), el sindicato de la empresa pública, anunció este miércoles que trabaja "en la organización de un gran paro nacional" junto a la Confederación de Sindicatos de la Industria, la Coordinadora de Sindicatos de Ancap, la Mesa Sindical Coordinadora de Entes (MSCE) y el PIT-CNT. En diálogo con El País, el presidente del sindicato, Gerardo Rodríguez, indicó que podría ser el 30 o 31 de agosto y que la fecha se definiría en las "próximas horas".
Esta medida responde al comunicado de Ancap de este martes, que comunicó que no renovará el convenio colectivo y convocó a "negociar uno nuevo", entre otras medidas. Sobre el convenio, aseguró: "No son instancias de acercamiento sino que por el contrario es una especie de declaración de guerra".
Además, Fancap señaló que continuarán los paros establecidos a fines de julio en diferentes plantas y se harán nuevos. Mañana, jueves, se hará un paro en La Tablada, - la principal distribuidora de Ancap, que abastece combustibles a Montevideo, Canelones, Maldonado, Rocha, San José, Florida y Lavalleja - y en las oficinas centrales, Minas, Paysandú, Treinta y Tres, Durazno, Juan Lacaze, Turno fijo de refinería, Laguna del Sauce y Manga.
Rodríguez resaltó que "no hay ninguna posibilidad de que exista desabastecimiento" de combustibles por estas medidas.
En diálogo con El País, el presidente de Ancap Alejandro Stipanicic señaló que no habría desabastecimiento de combustible este jueves por el stock con el que cuentan las estaciones de servicio. De todos modos, dijo que podría ocurrir que alguna tenga dificultades en caso de que se quede sin stock este miércoles.
Tras el comunicado de Ancap de este martes, Rodríguez contó que no hubo comunicación con autoridades de la empresa pública y apuntó contra el gobierno encabezado por Luis Lacalle Pou. "El gobierno sabe el rol que jugó Fancap en el referéndum (contra la LUC) y nos tira a partir", lanzó.
"Por un lado, están procediendo al desmantelamiento de Ancap y saben que desprestigiando al sindicato nos pueden poner en contra de la gente. Eso no lo vamos a permitir", agregó.
Respecto a si evalúan enviar una carta al directorio de Ancap, respondió: "La relación con Ancap está muy tensa, y hay algunos pasos que dieron integrantes del directorio en cuanto a acusaciones que no tienen fundamento que dinamitan la posibilidad de diálogo". No obstante, dijo que "siempre" están abiertos al diálogo con las autoridades.
El sindicato considera que los pasos de las autoridades "se enmarcan en un proceso de desmantelamiento de ANCAP cuyo marco normativo es la Ley de Urgente Consideración, la Ley de Presupuesto y la Rendición de Cuentas".
Por otro lado, remarcaron que "continúa el proceso de persecución a las y los trabajadores del Ente, y a la organización sindical que los y las representa, denunciando los convenios colectivos que consagran conquistas y derechos adquiridos durante casi 30 años".
Fancap consideró que el "ataque" al sindicato "no sorprende" y lanzó: "Es el precio que debemos pagar por enfrentar el proyecto político de la derecha neoliberal, clasista y autoritaria como lo hicimos siempre, en la dictadura, en la década de los 90, en el 2003, y lo estamos haciendo ahora, con las firmas, con la lucha en la calle, y en las urnas con el referéndum".
Aludiendo al cruce de directivos de Ancap con el sindicato por medidas que podrían desabastecer a la población, manifestaron que "integrantes del Directorio, ministros de Estado y senadores "atacan" a sus dirigentes y a la organización sindical.
Otro aspecto que mencionaron es que trabajarán para "ganar el referéndum contra los 135 artículos de la LUC", bajo el entendido de que es parte "fundamental de la estructura que sostiene el proyecto político de la derecha, desestatizador, antipopular, regresivo, represivo, y concentrador del poder y la riqueza", indicaron.