FINANCIADO POR  FUNDACIÓN ÁLVAREZ CALDEYRO BARCIA

En Uruguay nacen al año 1.000 niños con malformaciones que son diagnosticados prenatalmente. Hasta el momento, todos debían ser tratados recién después del nacimiento, debido a que se carecía de la tecnología necesaria para hacer cirugías intrauterinas. Gracias a donaciones, la Fundación Álvarez-Caldeyro Barcia concretó en diciembre del 2021 la compra de un fetoscopio que permitirá que cientos de estos bebés puedan ser intervenidos antes de su nacimiento.

“Antes todas las mujeres que recibían diagnóstico por malformación tenían que viajar al exterior para poder pasar por cirugías de estas características, pues son operaciones particularmente complejas”, indicó la médica encargada de la Unidad de Ecografía y Medicina Prenatal del Hospital Pereira Rossell, Ana Bianchi. Según la experta, la pandemia sirvió para cambiar esta realidad, “porque las mujeres que solían irse al exterior ya no podían viajar y se tenía que buscar una solución”.

Desde que llegó el equipamiento, en el Pereira Rossell se han realizado dos intervenciones quirúrgicas y las dos “tuvieron excelentes resultados”, según Bianchi. En ambos casos se trató de embarazos gemelares con malformaciones congénitas. Sin embargo, la experta destacó que aún resta “un desafío” vinculado al uso del fetoscopio y este tiene que ver con la capacitación del personal. “Hoy para usarlo es necesario contar con médicos del exterior que suelen trabajar con equipos así, pero estamos en proceso de capacitación y la próxima cirugía que ya está planificada para las próximas semanas solamente va a requerir de una parte del equipo extranjero, porque ya se ha capacitado personal uruguayo”, explicó Bianchi.

La médica explicó que se formó un “grupo interdisciplinario” y varios ginecólogos especialistas en medicina fetal, neonatólogos y anestesistas están instruyéndose acerca de este tipo de intervenciones.

El mecanismo de la fetoscopía es similar al de la paroscopía y permite intervenir al feto antes del nacimiento. Además de los embarazos gemelares, la espina bífida es otra de las condiciones que “genera más demanda” de cirugía fetal.

“Hoy los niños que nacen con esa malformación reciben la atención necesaria después de nacidos, pero hay una diferencia notoria cuando se hace un procedimiento antes del parto”, destacó Bianchi.

El aparato tiene un valor de US$ 200.000 y fue adquirido por la Fundación Álvarez- Caldeyro Barcia, dedicada a proyectos de prevención y desarrollo de los nacimientos prematuros.

Por su parte, la pediatra gastroenteróloga y presidenta de la Fundación, Daniela Armas, dijo que, así como la organización sin fines de lucro coordinó la adquisición del fetoscopio, también seguirá “buscando donaciones para la capacitación con médicos brasileños” que “son pioneros en la región”.

Armas contó que “hasta ahora, todo lo que se adquirió fue a través del mecanismo de la ley de donaciones especiales del Ministerio de Economía”.

La inauguración oficial del nuevo equipo será hoy y está previsto que asista el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, y autoridades de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE).