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Una reforma genera preocupación en la coalición por la carrera electoral: ¿cuál es?

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Luis Lacalle Pou en conferencia de prensa. Foto: Estefanía Leal.

UNA PROMESA DE ESTE GOBIERNO

Lacalle Pou presentará a sus legisladores los lineamientos de cambios en seguridad social, pero muchos en el oficialismo lo consideran un tema “poco simpático” para la ciudadanía.

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En el sistema político los cálculos electorales son parte de la realidad diaria. Los que están en el poder buscan gobernar, pero al mismo tiempo mantenerse. Este razonamiento, tan obvio, está muy presente en estos momentos en el Parlamento, de cara a una reunión a la que mañana fueron convocados los legisladores de la coalición en la Residencia de Suárez y Reyes.

Allí el presidente Luis Lacalle Pou les presentará al Partido Nacional, al Colorado, al Independiente y a Cabildo Abierto los principales lineamientos de una promesa importante de este gobierno: la reforma de la seguridad social.

Para empezar, en el oficialismo hay un acuerdo tácito; que no está firmado en ningún lado, pero del que todos saben: la reforma saldrá solo si el Frente Amplio acompaña la iniciativa con sus votos.

Antes de tomar el mando, Lacalle Pou dio su compromiso de que impulsaría la reforma para cortar a lo que se refirió como “una bomba de tiempo” en el sistema jubilatorio. Pero no fue tan fácil implementar esto, especialmente por dos razones: la pandemia, que acortó los tiempos para hacer reformas de fondo, y la posterior campaña para defender la Ley de Urgente Consideración (LUC).

Como sea, el jefe de Estado avanzará hoy con su promesa y les presentará a los integrantes de la coalición de gobierno los lineamientos centrales de un proyecto que está decidido a enviar al Poder Legislativo. El punto central de este, según supo El País, será llevar adelante un aumento de la edad jubilatoria para, así, evitar un colapso del sistema, al menos a mediano plazo.

Pero claro, tanto importantes dirigentes en el gobierno como los legisladores del oficialismo ven que es un tema “poco simpático” para la ciudadanía, y temen que un proyecto de esta magnitud pueda tener consecuencias en la opinión del electorado.

El Frente Amplio emitió una declaración el lunes 9, tras una reunión de su Mesa Política, en la que dejó en claro que el tema es “responsabilidad del gobierno”, que este “es mano” y es el encargado de “mover” las fichas en este sentido.

En general hay consenso en cuanto a realizar una reforma. Así lo han manifestado dirigentes de todos los partidos. La diferencia pasa por quien asume el “costo político” de decirle a un grupo de gente que tendrá que esperar más de lo que marca el actual sistema para jubilarse.

Fuera de las declaraciones públicas, los blancos aseguran que, o se comparte la responsabilidad con el Frente, o se “patea la pelota para adelante”.

“Las elecciones ya están muy cerca, y no es justo que seamos nosotros solos los que asumamos esa responsabilidad cuando es un tema que compete a todo el sistema”, dijo un senador del Partido Nacional ayer a El País.

Los colorados piensan lo mismo. Uno de los legisladores de este partido consultados señaló que ya se perdió mucho tiempo, y que la reforma debía haberse elevado al Parlamento cuando se envió la LUC.

Para la reunión de hoy en Suárez, Lacalle Pou invitó a Rodolfo Saldain, presidente de la Comisión de Expertos en Seguridad Social, para que presente los lineamientos generales del proyecto. Además de todos los senadores de la coalición, también asistirá el expresidente y líder colorado Julio María Sanguinetti.

Expectativas

El senador blanco Sebastián Da Silva dijo a El País que este tipo de discusiones “deberían quedar fuera de toda puja partidaria”. Y agregó: “Ningún uruguayo tendría que aspirar a llevar agua para su molino en un tema de tal magnitud. Ha habido muchas manifestaciones de altos dirigentes frenteamplistas cuando estaban en el poder, y coinciden con lo que hoy creemos nosotros. Hay que ver si vamos del dicho al hecho”, comentó.

El senador cabildante Guillermo Domenech remarcó que este es un claro tema para enmarcar en una “política de Estado”. “En un país donde tenemos a los votantes muy divididos, nos parece que es difícil, si no hay apoyo de un sector de la oposición, aprobar una reforma de la seguridad social. La política implica responsabilidades”, comentó a El País.

Por su parte, el senador colorado Germán Coutinho dijo que todo el sistema político conoce el diagnóstico de la seguridad social en Uruguay. “Vamos a concurrir con esa expectativa, y con la de generar nuevos insumos al tratar el tema con el presidente. A partir del diagnóstico del jueves vamos a empezar a reunirnos como partido para tomar una definición unitaria sobre el tema”, comentó a El País.

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