Redacción El País
Siguiendo una ruta planificada desde hace tiempo para este último año de mandato -para el que se prevé una serie de inauguraciones con impacto en la vida corriente de la gente-, el presidente Luis Lacalle Pou cortó ayer la cinta del Centro de Referencia de Políticas Sociales en Casavalle, luego de dar un discurso en el que defendió la apuesta de su gestión.

Lo hizo acompañado por su gobierno en pleno y los tres precandidatos de su Partido Nacional -Álvaro Delgado, Laura Raffo y Jorge Gandini-, lo cual, sumado el ámbito festivo que rodeó a esta inauguración -globos de colores nacionalistas y música en vivo-, generó varios reproches por parte del Frente Amplio (FA) por considerar el evento un acto político-partidario. Incluso desde filas de la propia coalición de gobierno hubo algunos comentarios en este sentido, como el del diputado colorado Felipe Schipani, quien escribió en Twitter que “el que tuvo la pésima idea de colocar los globos blancos y celestes no entiende nada”.

Ajeno a esto, Lacalle Pou dio un discurso de menos de 10 minutos, pero en el que -con tono encendido y voz enérgica- aludió otra vez a los fundamentos ideológicos de su política: su apuesta a un Estado presente allí donde la población vulnerable tiene menos oportunidades, con el fin último de acrecentar la libertad de todos los individuos “(Porque) si el Estado abandona a determinadas poblaciones, individuos, las personas no van a poder tener herramientas para ser libres”.

Y acto seguido, por elevación, cuestionó algunas inversiones fallidas en gobiernos del FA, tópicos que han estado en boca de dirigentes del oficialismo la semana pasada, que generaron varios cruces con precandidatos de la coalición de izquierda.

“Este gobierno ha hecho un fortísimo hincapié y lo va a hacer en los próximos 376 días que quedan de gobierno, en poner recursos del Estado donde se necesitan, y no en historias locas que se llevan el dinero de la gente”, exclamó ayer el mandatario cuando un tórrido sol de verano, que para entonces había secado la lluvia de la mañana, molestaba al auditorio que escuchaba de pie.

“¿Y saben qué? -continuó-. No es tan difícil. Difícil es para el que paga los impuestos, para el que no tiene laburo y para el que tiene que ir a un comedor”.

De todos los actores involucrados en este proyecto -que incluye, además del Mides, al Ministerio de Salud Pública, ASSE, UTE, OSE, Antel, el Banco República y el Instituto Nacional de Alimentación, entre otros-, uno de los más importantes es el ministro Lema, quien a su turno destacó que este centro “se construyó con amor, esfuerzo y pensando en los vecinos”, y agradeció luego a las 16 instituciones públicas que tendrán representación en el lugar, junto con 250 funcionarios trabajando allí en forma permanente.

Este centro, dijo el titular del Mides en la misma dirección en la que después profundizaría Lacalle Pou, representa el “orgullo de gobernar para los que más necesitan”. “Los vecinos nos decían lo que se necesita. Cuando nos decían que eran reclamos históricos, acá está la respuesta histórica”, añadió.

Por lo demás, como suele hacerse en cada presencia del presidente en inauguraciones, Lacalle Pou dedicó buena parte de su tiempo a sacarse selfies con militantes, y a recorrer las nuevas oficinas. La nota de color, en esta oportunidad, la dio la tecnología, ya que este centro tendrá a disposición tótems para facilitar la tramitación de servicios a los vecinos, e incluso un robot -en el caso de Antel.

El presidente probó uno de los tótems -el de UTE- y, aunque se mostró con prisa y casi no esperó a que lo atendieran, convencido por Silvia Emaldi, presidenta de UTE, se quedó y diálogo con la funcionaria que finalmente apareció en la pantalla, sorprendida al ver el rostro del presidente de la República.

Si bien hubo representantes de todos los partidos de la coalición de gobierno, la mayoría de los precandidatos del oficialismo -sin contar a los tres nacionalistas y al líder del Partido Independiente, Pablo Mieres- no estuvieron presentes. Faltaron el senador y conductor de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, y los precandidatos colorados Robert Silva, Gabriel Gurméndez, Tabaré Viera y Gustavo Zubía -el único precandidato de este partido fue Andrés Ojeda.

Pero también faltaron dirigentes del Frente Amplio -la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, estaba invitada y no asistió-, algo a lo que se refirió ayer luego del evento el precandidato Gandini. “Tendrían que haberse abrazado a esta obra que va a generar un fortísimo impacto social en la zona”, dijo el senador wilsonista.

También fue consultado por las críticas sobre la politización del acto, a lo que respondió “¿Cuáles son los colores de mi bandera? No había un acto partidario. En todo caso -subrayó- faltaron dirigentes del Frente Amplio. Si quieren, no fue un acto plural, pero porque la gente del Frente no fue”.

Foto: Leonardo Mainé